Ya hemos hablado en algún artículo
que en Geometría Sagrada una de las maneras de equilibrar tu campo emocional es
hacer tu propio trazo en 2D y luego estereografiando pasarlo a 3D, también
dijimos que este proceso se realiza a través de la Glándula pineal.
Hasta hace poco la Glándula pineal
era abordada por los biólogos como un órgano sin ninguna función actual
conocida, pero….. han empezado a darse cuenta de que es ligeramente sensitiva y
desarrolla varias funciones en nuestra fisiología. Es más que un órgano físico
activo.
La glándula pineal despierta es un
ojo que se abre a la realidad de dimensiones superiores, para muchos buscadores
espirituales es el “asiento del alma” y el “tercer ojo”, la parte anatómica del
cuerpo humano que actúa como nuestra antena espiritual, que nos conecta con los
planos espirituales, no físicos de la existencia. Es nuestro punto de contacto
con el entramado de la nueva conciencia Crística, la que rodea al planeta
(geometría Icosadodecaedrica) y lo conduce hacia su renacimiento en la cuarta
dimensión. Cuando hacemos consiente nuestro tubo pránico aquel eje que se
extiende desde una palma por arriba de tu cabeza, hasta una palma por debajo de
tus pies y tiene un diámetro igual al círculo, que puedes hacer tocando la
punta de tu pulgar con la punta del dedo medio o mayor, y además activamos la
pineal experimentamos la unidad en vez de separación y conciencia polar.
Una respiración correcta atrae prana
(una energía especial contenida en el aire que respiramos) a los dos extremos
del tubo. De esta manera el prana fluye por la glándula pineal en el centro de
la cabeza y se congrega en cada centro de energía llamado chakra.
El prana es una energía de la
conciencia multidimensional que cuando circula por la glándula pineal actúa
como un mecanismo interno de limpieza. Si bien esta respiración pranica se dejo
de practicar con la desaparición de la Atlántida, en la actualidad hay personas
que se alimentan pranicamente y he tenido el placer de conocer a una de ellas
Jasmuheen, quien escribió un libro llamado vivir de luz.
Despertar, levantarse, asumir la
responsabilidad de quien eres y recordar porque estás aquí, es importante para
tu experiencia en este planeta escuela, ya que cuando lo haces el universo
entero se reorganiza hasta ajustarse a la imagen de tu realidad, esa que deseas
crear con todo tu corazón.
Cuando despertamos verdaderamente
impulsados por el deseo de superar nuestras propias circunstancias nos
encontramos en el origen de la vida, creando un nuevo contexto para la
existencia.
Monique Dumoulin
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