WEN TZU - 37 LAO TSE DIJO





37
Lao Tse dijo:

La abstracción tranquila y la luminosidad del cora­zón son maneras de alimentar la vida. La felicidad armoniosa y el desinterés vacío son maneras de asegu­rar la virtud.

Cuando las cosas externas no te perturban interna­mente, tu naturaleza encuentra lo que le conviene; cuando la quietud no acepta la armonía, la virtud des­cansa en su sitio.

Si alimentas siempre la vida y aceptas la virtud, a esto puede llamársele capacidad de comprender y encarnar el Camino.

Cuando éste es el caso, no hay bloqueo estancado en las venas sanguíneas, ni energías acumuladas en los órganos; ni la calamidad o la fortuna pueden molestar­te, ni las críticas o los halagos pueden engañarte.

¿Quién puede tener éxito a menos que tenga su tiempo? Incluso si las personas poseen talento, si no encuentran el tiempo adecuado, no pueden todavía libe­rarse a sí mismas, especialmente si les falta el Camino.

Los oídos de alguien cuyos ojos están examinando la punta de un pelo fino no oyen el restallar del true­no; los ojos de alguien cuyas orejas están afinando un instrumento musical no ven una enorme montaña. Así, cuando existe la fijación de la atención en peque­ñas cosas, se olvidan las grandes cosas.

Ahora todo llega y desgasta nuestras vidas, extra­yendo de nuestra vitalidad como si fuera una primave­ra. Aunque queramos negarnos a estar sometido a esto, ¿podemos lograrlo?

Ahora bien, si quisiéramos aclarar una taza de agua, se necesita al menos un día antes de que poda­mos ver nuestras cejas y parpadeos reflejados en ella; pero basta sólo con un movimiento para hacerla tan turbia que no podamos ver nada más en ella. Al igual que una taza de agua, el espíritu vital en los seres humanos es difícil de aclarar y fácil de enturbiar.






No hay comentarios:

Publicar un comentario