LA MEDITACIÓN Y LA CONCIENCIA



Transforma el dolor con conciencia
Cuando elevamos nuestra consciencia, nos volvemos más concientes de las sensaciones que ocurren en nuestro cuerpo y vemos que las sensaciones cambian. Una sensación intensa de dolor y una sensación de placer, ambos se vuelven placenteros.
El amor y el dolor están íntimamente emparentados. El símbolo de Jesús en la cruz significa que la cruz es dolor y Jesús es amor. El uno está con el otro. La transformación de este dolor en júbilo, del amor en júbilo, es lo que ocurre con la consciencia.
Las dudas disminuyen con la conciencia
Has notado que siempre hay dudas sobre algo positivo?
  • Cuando eres feliz, dudas: “Soy realmente feliz?
  • Si alguien te dice que te ama, dices: “De verdad? Estás segura?”
Nunca dudamos nada negativo en la vida:
  • Nunca dudas del enojo de otros o tuyo
  • Nunca dudas de tu depresión
  • Si alguien te dice que te odia, no dudas que es así
Damos por sentado que todo el mundo es un engaño o un fraude y luego tratamos de encontrar alguien en quien confiar. Se vuelve muy difícil en este mundo.
Si puedes dudar de la negatividad de la gente, te acercas a la realidad.

Con esta conciencia, cuando aumentas el nivel de energía en tu cuerpo:
  • Verás que las dudas desaparecen
  • Hay más claridad mental
  • La confusión desaparece de la mente
Meditar es expander la mente
La meditación es una técnica donde la mente se expande y relaja.
  • Cuando eres felíz, sientes que algo en ti se expande
  • Cuando estás relajado, automáticamente te expandes
Vale la pena saber acerca de esta expansión, ya que entonces nada puede molestarte, o quitarte la sonrisa.
De lo contrario, algo pequeño puede sacarte de balance. La expresión de la tristeza es la contracción de la mente. No vale la pena dejar que tu mente o tu vida padezca tanto sufrimiento, tanta miseria.
Desarrolla una conciencia intuitiva con la meditación
La conciencia intuitiva, el factor intuición es lo que viene en tu ayuda. Si careces de intuición, no puedes ser exitoso! La intuición no es pensamiento a secas. Es una combinación de presentimiento, emoción e intelecto. “Antarnath… Antargyan.”
Si le preguntas a alguna persona exitosa en nuestra sociedad, responderían esto: Actuaron por una intuición y eso los llevó al éxito, no su planificación lógica o su pensamiento. Por supuesto que es necesaria, la lógica es necesaria, pero no es lo único! Tienes que tener el apoyo de la conciencia intuitiva… y sonreir MÁS!
La meditación aumenta el Prana =>
El Prana aumenta la conciencia =>
La conciencia elevada te acerca a la realidad
En los comentarios de los Yogasutras de Patanjali, Su Santidad Sri Sri Ravi Shankar dice: “(Con crecimiento espiritual), hay interés por la observación. Te encuentras totalemnte relajado, pero al mismo tiempo posees la agudeza de la conciencia y la fuerza de la inteligencia. Tus sentidos se vuelven tan claros. Puedes ver mejor, pensar mejor, escuchar mejor. Como un cristal puro, tus sentidos reflejan todos los objetos como una sola Divinidad.”

Fuente: The art of Living





CAMBIO´ CLIMÁTICO: LA NECESIDAD DE UN MUNDO MÁS RELACIONAL



El caos ambiental y el cambio climático, en particular, no son condiciones posibles de circunscribir a unos pocos factores por controlar, tales como las emisiones de CO2.

Más allá de las apariencias, de lo evidente a nuestros ojos, y de lo que es posible percibir con nuestros sentidos, existe la realidad subyacente, que es un mundo de relaciones.
Todos los problemas personales, familiares, sociales y mundiales obedecen a la falta de comprensión de que todos los seres y todas las cosas están unidas entre sí por enlaces o conexiones no siempre evidentes. Es lo que en física cuántica se llama entrelazamiento cuántico y que nuestro actual paradigma científico y social prefiere no tomar en cuenta.
Así, la antigua ley física newtoniana de causa y efecto, que a nivel personal y social se describe en Oriente como karma, toma una dimensión más amplia y holística para nuestra civilización.
El caos ambiental y el cambio climático, en particular, no son condiciones posibles de circunscribir a unos pocos factores por controlar, tales como las emisiones de CO2, por ejemplo. Son muchas las variables en juego y, con toda probabilidad, no sabemos la jerarquía ni el orden de los mismos. No importa con cuánta “ciencia” se revista el problema, lo cierto es que no sabemos lo que sucede con el cambio climático.
El problema no es el clima ni el medioambiente, somos nosotros y la forma en que nos relacionamos entre nosotros y con el medioambiente, al cual tratamos como si todavía estuviéramos en el siglo XIX.
El cambio climático obedece a causas naturales y a causas humanas y desconocemos el peso de ambas variables, que ni siquiera se han medido. Parafraseando a Epicteto, hay que preocuparse de las cosas que dependen de nosotros, y no de las que no tienen relación con nuestros actos.
Todo cambio exterior parte de un cambio interior, y ese es el verdadero activismo que permite poner orden en los elementos de nuestra casa mundial, el oikos de los griegos, raíz etimológica de la ecología y la economía, ambas fuertemente entrelazadas, aunque para nuestra sociedad, aparentan no tener relación entre sí.
Si queremos un mundo más amable, más armónico y más limpio, el cambio necesariamente debe partir por nosotros mismos y por nuestra relación con el entorno. Las medidas externas no solucionarán nada, pues no apuntan a la causa del problema, sino que solo se centran en sus efectos.

Fuente: Mundo Nuevo




LA RUTA DE LA SEROTONINA QUE VA DEL ESTÓMAGO AL CEREBRO




Los procesos de la mente humana están controlados sobre todo por el cerebro. Pero la importancia de la microbiota o flora intestinal es tal que entre el 90% y el 95% de la serotonina y el 50% de la dopamina se producen en el intestino delgado. Merece la pena saber un poco más sobre estos neurotransmisores porque están asociados con muchos trastornos de la mente.

Los niveles de serotonina bajan por el estrés. Como neurotransmisor, la serotonina transmite señales entre las neuronas regulando su intensidad. Se produce en el cerebro y es imprescindible que esté en el cuerpo para sintetizar su propia dosis. Casi toda la serotina la concentramos en nuestro intestino porque ahí es utilizada para regular su movimiento. Parte del resto puede encontrarse en el sistema nervioso central.

Serotonina

La serotonina tiene mucho que ver con el triptófano, un aminoácido esencial en la nutrición humana que es clave para promover la liberación del neurotransmisor que me ocupa. La falta de triptófano puede contribuir negativamente a cuadros de ansiedad, insomnio y estrés.

El triptófano sólo se obtiene a través de la alimentación. Abunda en los alimentos ricos en proteínas. Lo contienen el huevo, el amaranto, la leche, los cereales integrales, el chocolate, los dátiles, las semillas de sésamo, los garbanzos, las pipas de girasol o de calabaza, los cacahuetes, los plátanos, la calabaza, la espirulina, las carnes rojas, el pescado, el pollo o las almendras, entre otros.

Para tener buenos niveles de tritófano y que éste sintetice la serotonina y por tanto estemos más relajados, menos nerviosos o estresados, durmamos mejor y demás, es necesario tomar estos alimentos. Y como las relaciones simbióticas de los elementos de nuestro organismo son algo complejas hay que saber que para un buen metabolismo del triptófano se requieren niveles adecuados de vitamina B6 y de magnesio.

La primera se ha de reponer diariamente con la dieta. Se encuentra en el germen de trigo, carne, huevos, pescado y verduras, legumbres, nueces o alimentos ricos en granos integrales. Adivino tu pregunta: ¿En qué alimentos se está presente el segundo? Respuesta: En frutos secos como girasol, sésamo, almendras, pistacho, avellanas y nueces. En los cereales: germen de trigo, levadura, mijo, arroz, trigo y avena. En legumbres: soja, alubias, garbanzos y lentejas. En el chocolate negro. Y en los germinados debido a que la clorofila contiene magnesio. De lo que comemos sólo entre el 30 y el 40 % es absorbido por nuestro organismo y depositado en el intestino delgado.



Esto que has leído es un bonito ejemplo de coordinación entre sustancias y procesos. Si te das cuenta, hay alimentos que son comunes a este proceso de sintetización natural de la serotonina a través del triptófano, que a su vez lo hace a través de la vitamina B6 y el magnesio. No es tan difícil pues, que el cuerpo se ocupe de esas reacciones químicas complejas y nosotros quedemos para ocuparnos de alimentarnos bien.

La serotonina pues influye en varias funciones corporales como la regeneración hepática, esencial para la depuración de nuestro organismo y la división celular. Por ser un neurotransmisor puede afectar el peristaltismo intestinal -las contracciones musculares organizadas que ocurren a todo lo largo del tubo digestivo- y reducir el apetito.

También, como explicamos, influye en las funciones psicológicas; si nos falta se alteran el estado de ánimo, la ansiedad y el sentimiento de felicidad decae. Así que la ecuación sería: correcta alimentación-intestinos sanos-menos estrés y ansiedad y más felicidad. Esa es la ruta que va del estómago al cerebro.

Miguel Jara


Miguel Jara


«PAREMOS EL CONSUMO DE LECHE», ASEGURAN EN HARVARD



Estudios recientes han demostrado que el consumo de leche de vaca puede ser perjudicial para la salud; cuestionan los beneficios y cualidades nutricionales de este alimento que por años se ha considerado esencial para la dieta debido al imaginario de que aporta calcio y ayuda a mantenerse en forma si se consume baja en grasa.

Leche baja en grasa no es beneficiosa
El estudio del doctor David Ludwig, un científico de la Universidad de Harvard, suplica que paremos el consumo de leche con bajo contenido de grasa o productos derivados.

El estudio, publicado en el Diario de la Asociación Médica Americana de Pediatría, reveló que, al extraer la grasa de la leche, esta era sustituida por azúcares, que pueden ser potencialmente más perjudicial a largo plazo.

Nunca se había incluido la leche con bajo contenido de grasa dentro de la lista de bebidas azucaradas. Por eso el estudio del Doctor Luwig cuestiona la justificación que se le dio a la promoción y difusión de la leche baja en grasa, teniendo en cuenta que todos los líquidos que contienen calorías y azúcares deben ser tratados con el mismo cuidado.

¿Es necesario el consumo de leche de vaca?
El científico coincide con otros estudios para considerar que los seres humanos no adquieren beneficios nutricionales de la leche de vaca, y puede incluso llegar a ser muy perjudicial para el cuerpo. Leer más en: Patricia bernal crié a mis hijos sin leche o en 5 errores frecuentes en el consumo de la leche de vaca

La leche de vaca es popular por su contenido de calcio, lo que para muchos expertos es esencial para la salud ósea. Sin embargo, hay otros alimentos que son más ricos en calcio que la leche de vaca, y no tienen los efectos negativos para la salud que la leche puede tener a largo plazo. Ejemplo de ellos son:
*Brócoli
*Col rizada
*Rúcula
*Espinaca
*Sardinas
*Nueces
*Semillas
*Verduras
“Hay pocos ensayos clínicos en los que podamos ver las diferencias claras de la leche desnatada en comparación con leche entera, en relación con sus beneficios para mantener el peso y otras ventajas para la salud. Por el contrario, varios estudios han encontrado que las personas que consumen leche con bajo contenido de grasa se sienten menos saciadas y son más propensas a aumentar de peso, ya que tienen una mayor necesidad de aumentar la ingesta de calorías”, asegura el científico.

¿De dónde viene la leche?
Algunas recomendaciones de los expertos para consumir leche, si la necesidad de la persona lo exige son:

Consumir leche entera, siempre que sea orgánica.
Probar con productos lácteos los cuales pueden llegar a mejorar la salud del corazón, la diabetes, la absorción de vitaminas, reducir el riesgo de cáncer de colon, entre otros.
Considerar si realmente la leche es buena para la salud y hacerse primero la pregunta: ¿de dónde viene la leche?
Es difícil encontrar un tipo de leche que sea verdaderamente saludable para el organismo. La cantidad de hormonas que se aplica en las vacas para que puedan aumentar su producción diaria de leche altera significativamente el producto, algo que es muy peligroso para la especie humana.

Fuente: EQUILIBRIUM


MI AMIGA

La imagen puede contener: una persona
-¡Mami, salgo con mi nueva amiga a jugar!
-¿Quien es tu nueva amiga Andres?
-Sara. 
-¿Qué Sara?
-Pues, Sara.
-¿Sara, Sara qué más? ¿Quienes son sus papás? ¿A qué se dedican? ¿A qué colegio va? ¿Tiene hermanos? ¿En qué calle vive?
-No lo sé, ¿qué importa eso?
-Pues no vas a salir con alguien que no conoces.
-Pero... si la conozco.
-Bueno, pues dime quien es esa tal Sara.
-Mamá, pues, Sara, mi amiga.
-Creo que se de alguien que si no me dice quien es esa chica no sale hoy.
-Vale, Sara es mi amiga. Ella juega conmigo a curar a los animales; le gustan las mariposas, cuando ve una, se para y puede estar sin pestañear horas y horas solo mirando a la mariposa, en esos momentos no existe nadie, siquiera yo. Ella ríe por cualquier tontería que yo cuente, aunque no tenga gracia; su pelo reluce cuando lo rayos de sol se posan sobre su cabeza; su voz es dulce y no me canso de oírla contar cosas; mamá, no se quien es su hermano, siquiera se si tiene, tampoco sé dónde vive, ni quienes son sus papás...pero si sé que conozco a Sara y ella es mi mejor amiga. Ella me consuela si estoy triste, ella me coge de la mano para cruzar el río por las piedras, ella me abraza solo porque si, ella es mi amiga y no necesito saber nada más.
Si no me dejas salir, me quedaré en casa, pero ella y yo estaremos tristes, solo porque si, porque tú quieres saber, no conocer, no sentir 

AUTORA: Rosa Francés Cardona (Izha)

CAUSAS EMOCIONALES DE LA DIABETES. TODA ENFERMEDAD ES UN LLAMADO AL CAMBIO.



Nos enfrentamos a una de las enfermedades más extendidas en la actualidad que afecta a hombres, mujeres, niños, de cualquier procedencia dificultando sus vidas. No se está prestando la debida atención, a lo que oculta  en la mayoría de los casos a las causas emocionales de la diabetes.
La Diabetes esta frecuentemente relacionada con tristeza profunda que se produce después de un acontecimiento en el cual sentí́ rencor contra la vida.
La diabetes es una enfermedad del páncreas, glándula importante y con múltiples funciones en el cuerpo humano.
Indica un deseo de ser amado, combinado con una inhabilidad para dejarse amar.
El resultado es “hiperacidez” o sea, los que no aman, se vuelven ácidos. Te falta el dulzor de la vida y añoras el amor que no puedes dar.
No esperes esa pareja ideal imaginaria, deja que el amor te llegue de todas partes. Suelta el pasado y reconoce que el amor, el disfrute y el afecto son elementos fundamentales de la vida.
La diabetes es consecuencia de una deficiencia en la función endocrina del páncreas, que se manifiesta como un déficit de insulina. No obstante, algunos casos de diabetes se deben a una resistencia a la acción de la insulina, como también algunos tipos de obesidad.
Una de ella es producir insulina, la hormona necesaria para mantener una concentración normal de glucosa en la sangre

El páncreas es la glándula que está ligada al centro energético del plexo solar.

Todo problema en esta glándula indica que existe un trastorno en el nivel emocional. De hecho, este centro de energía administra las emociones, los deseos y la mente.
La persona que padece diabetes es emotiva y a menudo tiene muchos deseos.
Es del tipo de persona que desea algo para sí misma y también para todos sus seres queridos.
Quiere que todos reciban una rebanada del pastel. Sin embargo, puede ponerse celosa cuando alguien tiene más que ella.
En general, es una persona muy servicial, pero con muchas expectativas
Actúa con todos como madre y se culpa fácilmente si lo que desea para los demás no se realiza. Existe en ella una gran actividad mental debida a una búsqueda intensiva de los medios necesarios para dar respuesta a sus expectativas.
El hecho de cultivar tantos deseos oculta una tristeza interior que proviene generalmente de un gran deseo de ternura y amor que nunca ha sido satisfecho.
La diabetes se manifiesta en el niño cuando éste no se siente suficientemente reconocido.
Su tristeza le ocasiona un vacío interior que busca una compensación. De este modo intenta llamar la atención.
Tu diabetes se presenta para advertirte que te sueltes y te des tiempo para dejar que las cosas sucedan en lugar de querer controlarlo todo.
Deja de creer que tu misión es disponer la felicidad de todos los que te rodean.
Eres el tipo de persona que logra lo que quiere, pero los demás no necesariamente desean las mismas cosas ni en la misma medida que tú.
Date tiempo para disfrutar las dulzuras de tu vida en su momento, en lugar de distraerte con lo que vas a querer mañana.
Hasta ahora has preferido creer que lo que deseas es siempre para los demás.
Acepta la idea de que esos deseos son, antes que nada, los tuyos, y luego reconoce todo lo que has obtenido hasta este momento.
Acepta también que, aun cuando un gran deseo no se haya realizado en el pasado, ello no te impide apreciar los deseos pequeños que se hacen patentes ahora.
Si eres un  niño diabético, ha llegado el momento de que dejes de creer que eres el hijo perdido de la familia. Eres tú quien debe encontrar tu lugar.
La diabetes también llamada diabetes dulce, se manifiesta por una secreción insuficiente de insulina por el páncreas que resulta de una incapacidad de éste en mantener un porcentaje de azúcar razonable en la sangre.
Un exceso de azúcar sanguíneo se produce entonces y la sangre es incapaz de usar adecuadamente los azúcares en el flujo sanguíneo. Estos azúcares en exceso causan un porcentaje demasiado elevado de azúcar en la orina que se vuelve dulce.
El azúcar corresponde al amor, a la ternura, al afecto, la diabetes refleja pues diversos sentimientos de tristeza interior.
Es el mal de amor, una carencia de amor seguro porque necesito, a causa de mis heridas anteriores, controlar el entorno y la gente que me rodea.
Si tengo diabetes, suelo vivir tristezas seguidas, emociones reprimidas teñidas de tristeza inconsciente y ausentes de dulzura.
 La dulzura desapareció dejando sitio a un dolor continuo. Empiezo entonces a comer azúcar bajo todas las formas posibles: pastas alimentarias, pan, golosinas, etc. para compensar. El plano afectivo,  social o financiero puede resentirse. Intento compensar por todos los medios posibles.
Me limito en muchos campos. Me vuelvo “amargo” (amargura) frente a la vida, es la razón por la cual encuentro mi vida “amarga” y compenso por un estado más “dulce”.
Al tener dificultad en recibir amor, me siento ahogado y sobrecargado, pillado en mi situación incontrolable y excesiva.
El exceso está eliminado en la orina. Tengo pues una gran necesidad de amor y afecto, pero no sé actuar ni reaccionar cuando podría recibirlo.
Tengo dificultad en recibir el amor de los demás y la vida pierde gusto para mí. Es difícil soltarme y expresar el amor verdadero.
Mis esperas son frecuentemente desmedidas (quiero que la gente realice mis deseos) y me atraen frustraciones, ira, frente a la vida y el repliegue sobre sí.
Vivo mucha resistencia frente a un acontecimiento que quiero evitar pero que me siento obligado a sufrir. Por ejemplo, puede ser una separación, un traslado, un examen, etc. A esta resistencia se añadirá un sentimiento de disgusto, repugnancia, desdén frente a este acontecimiento. La hiperglicemia aparecerá pues en ese momento. Necesito asumirme en seguida. Necesito cambiar las situaciones que me afectan empezando a ver el amor y la alegría en todas las cosas.
La diabetes (o hiperglicemia, exceso de azúcar en la sangre) y la hipoglicemia (insuficiencia de azúcar en la sangre) (ambas vinculadas a la falta de alegría) están vinculadas directamente al amor que soy capaz de expresar para mí mismo y los demás.
En el caso de la diabetes gestacional, que se produce habitualmente después de la segunda mitad del embarazo, debo preguntarme las mismas preguntas que las que pregunto a las personas afectadas de diabetes.
Puede que la tristeza profunda, fastidio o resistencia se revelen a mi consciencia. Este embarazo puede activar y ampliar en mí el recuerdo más o menos consciente de estos sentimientos que pude vivir en mi infancia y la consecuencia será la diabetes.
Después del parto, el regreso a mi estado normal me indica que estos sentimientos han desaparecido o que su importancia ha disminuido enormemente, lo cual trae un restablecimiento de la cantidad de azúcar en sangre. (Glucosa).
Hay tanto amor disponible; ¿soy realmente consciente del amor que la gente tiene para mí? La gente me ama y debo verlo a partir de ahora.
Acepto el pasado de un modo desapegado, por lo que es.  Abriendo mi corazón se producen los milagros.

Consejos para prevenir y paliar la diabetes:

1.-Dar amor sin esperar nada a cambio.
2.-Trabajar el desapego Superar la dependencia
3.-En lugar de sufrir por no tener lo que creemos que necesitamos, dirigirnos
activamente hacia lo que deseamos.
4.-Hay que dejar sin miedo que el amor penetre hasta los niveles internos (las células)
5.-Aceptar el placer que proviene del contacto con el otro
6.-Disfrutar de la dulzura de la vida
7.-Buscar de manera activa la satisfacción, en el plano físico, psíquico y espiritual.

Fuente: Dragon Rojo







EL SILENCIO ES UN AMIGO QUE NUNCA TRAICIONA




A veces, es mejor respirar profundo y quedarnos callados
Dicen que el silencio es el arte que alimenta la sabiduría, por ello en ocasiones no hay más remedio que hacer uso de él para responder con acierto, para no continuar con conversaciones y hechos que no valen la pena.
Respirar profundo y quedarse callados en ciertos momentos es la mejor opción que podemos tomar.
El silencio, en ocasiones, actúa como un despertar de la conciencia, y eso es algo excepcional. No solo nos sirve para gestionar mejor conversaciones o situaciones puntuales, es también un canal donde tomar contacto con nosotros mismos para dejar de “hacer” durante un instante y, simplemente, “ser”.
Estamos pues ante un tema con interesantes matices y curiosos aspectos que pueden servirnos de gran ayuda en el día a día. Te invitamos a profundizar en los múltiples aspectos del silencio y en el arte de quedarnos callados.
El ruido mental, el ruido que nos envuelve y nos devora
Vivimos en la cultura del ruido.
No nos referimos precisamente a la presión del sonido ambiental, al ronroneo persistente del tráfico, al ronquido perpetuo de las fábricas o al eco de las grandes ciudades que nunca duermen.
Hablamos del ruido mental, ese alboroto de emociones contrapuestas.
Una discordancia mental que produce no solo que dejemos de escuchar a quien tenemos enfrente, sino que a menudo provoca que dejemos de escucharnos a nosotros mismos.
Estamos influenciados por un tipo de comunicación donde la voz entusiasta, la que grita y no deja pausas es la que triunfa. La vemos en nuestros políticos, la vemos en muchas de nuestras reuniones de trabajo, ahí donde quien guarda silencio se le etiqueta al instante como a alguien poco decidido o falto de carisma.
De hecho, el ensayista y periodista George Michelsen Foy, hizo un estudio para demostrar que en la cultura occidental la persona que guarda silencio antes de responder es vista con desconfianza o con sospecha.
Las conversaciones se ensamblan muchas veces a través de frases y palabras que no pasan por un adecuado filtro mental o emocional.
Se nos olvida que gestionar el lenguaje y la palabra es también el arte de la inteligencia, ahí donde el silencio, es a menudo un punto de paso necesario.
Detengámonos, al menos un instante, para encontrarnos.
Es necesario pararnos para ver y sentir al otro.
Comprendamos pues que no hay nada malo en tomar aire y quedarnos callados en medio de una conversación.
Tal vez lo que digamos tras esa pausa sea la solución al problema o la llave para recuperar nuestra relación.
Quedarnos callados y regalar silencio puede ser un castigo
George Bernard Shaw decía que “el silencio es la expresión más perfecta del desprecio”.
Así, debemos tener mucho cuidado en cómo lo utilizamos, en cómo lo aplicamos en función del contexto y las personas receptoras de eses silencio.
Hasta el momento, hemos dejado claro que el uso del silencio es una herramienta perfecta para gestionar las propias emociones, para centrarnos en el aquí y ahora y poder emitir así una respuesta o un tipo de acción más acertada.
El que no sabe estar en silencio no sabe hablar.
El emprendedor, investigador y conferenciante Luis Castellanos nos habla de este mismo tema en su libro “La ciencia del lenguaje positivo“.
El silencio es una pausa para nosotros mismos.
Quedarnos callados es algo necesario, por ejemplo, cuando volvemos del trabajo y estamos a punto de entrar a casa.
Algo tan sencillo como respirar profundo y permanecer en silencio unos segundos puede alejar la presión y la ansiedad de ese otro contexto que no debemos proyectar en casa.
Ahora bien, algo que estaría bien tener en cuenta es que el silencio puede actuar muchas veces como un cercenador de la calidad de nuestras relaciones personales.
Son las palabras las que educan, son las palabras las que sanan y ellas quienes nos ayudan a tender puentes, a crear raíces y consolidar nuestros vínculos a través de un lenguaje positivo, empático y cercano.
De ahí que debamos tener muy claro que el silencio no es un castigo positivo para ningún niño, que cualquier mal acto, travesura o desatino no se soluciona con retirarle la palabra o con renegarle a la soledad de su habitación. Con ello, lo que hacemos muchas veces es alimentar la ira.
En estos casos la comunicación es imprescindible, esencial para cambiar conductas, para reconocer errores y prestar ayuda hacia la mejora.
Hagamos pues un buen uso del silencio.
Hagamos de él nuestro palacio de calma donde reencontrarnos, donde armonizar emociones, donde calmar la mente y para encontrar en él, la mejor respuesta, la palabra más hermosa para el momento más necesitado.

 Valeria Sabater




ENRIC CORBERA: “LA LIBERTAD ES QUE LAS EMOCIONES NO NUBLEN TU MENTE NI CONTAMINEN TU CORAZÓN”



El español Enric Corbera conversó con Revista Mundo Nuevo sobre el ser humano y cómo nuestros pensamientos y creencias influyen en nuestras vidas y en el entorno, en aquello que conocemos como realidad, frente a lo cual es enfático al señalar que lo único que debemos sanar es nuestra percepción, pues cuando alguien se cuestiona su verdad, inicia el camino hacia el despertar de la conciencia.

Alejandra Vidal de la Cerda, 29/08/2017


Enric Corbera (63 años) es hoy en día unos de los hombres más conocidos a nivel mundial por ser uno de los “líderes” en materia de transformación personal. A través de la Bioneuroemoción, método creado por él, enseña cómo manejar los estados emocionales durante distintas situaciones de nuestras vidas, poniendo énfasis en un proceso libre de juicios y de justificaciones.  Enric Corbera (63 años) es hoy en día unos de los hombres más conocidos a nivel mundial por ser uno de los “líderes” en materia de transformación personal. A través de la Bioneuroemoción, método creado por él, enseña cómo manejar los estados emocionales durante distintas situaciones de nuestras vidas, poniendo énfasis en un proceso libre de juicios y de justificaciones.

Sin quererlo, este Ingeniero Técnico Industrial, Naturópata, Sofrólogo y Licenciado en Psicología, ya lleva más de 20.000 alumnos en todo el mundo, los que se suman a otros miles de seguidores que observan lo que dice y lo que enseña en charlas y videos que se propagan y comparten a través de internet. De visita en Chile, Corbera podrá compartir con sus alumnos y seguidores en dos instancias, oportunidades en las cuales profundizará en la Bioneuroemoción y otras técnicas, que permiten que los seres humanos puedan vivir mejor y encontrar el propósito de sus vidas.




¿Cómo empezaste a encontrar tu camino? ¿Cuáles fueron los hitos que te marcaron?

El camino no se encuentra, lo estás haciendo constantemente. Es un sendero que se abre a tu paso y se cierra detrás. Es un sendero que se abre a medida que tú vas tomando conciencia de quién eres y de cuál es tu sentido en la vida. En este sendero, van apareciendo tus maestros (en forma de libros mayoritariamente en mi vida). Es un camino particular que todos vivimos, y que se puede explicar en el famoso Mito del Héroe, o proceso de Individuación, tal como nos expresan grandes maestros como Carl G. Jung, Joseph Campbell o Eric Newman, entre otros muchos, en el ámbito de la ciencia, de la filosofía, de la psicología y del humanismo en general, así como los grandes maestros espirituales, como Buda, Lao Tse, Jesús, etc., que me inspiraron.

¿Qué es la Conciencia de Unidad? ¿Cómo se provocaría y por qué es tan importante?

La Conciencia de Unidad es la energía infinita que sustenta las miríadas de partículas de conciencia en un mar de dualidad. La Conciencia de Unidad no es algo que uno deba de adquirir, pues es la esencia de la cual emanamos todos. Solamente hay un objetivo y un sentido en nuestras vidas, y este es desarrollar la Conciencia de Unidad en nuestra Conciencia Dual. Saber trascender los opuestos vendría a ser como si el Reino de los Cielos se instaurara en la Tierra. Cuando las conciencias acercan las polaridades, rechazan el posicionamiento como ataque al otro, y comprenden que estas no pueden existir la una sin la otra, entonces, todo se complementa.  La Conciencia de Unidad integra las polaridades y permite con ello que aparezca la luz del conocimiento. Vivir en la dualidad, en la creencia en la separación, es vivir en el dolor y en el sufrimiento, es creer que la causa de todo lo que te ocurre y sus posibles soluciones está afuera. El cambio que tanto anhelas o surge de ti de una forma espontánea o no es cambio. Entonces, estás en la creencia en el control que es la esencia de la Conciencia Dual.

Hay que estar alerta con las divagaciones de la mente, pues de alguna forma están creando nuestra realidad.

¿Por qué la percepción de las personas se llena de prejuicios?

Lo único que debemos sanar es nuestra percepción. Esta nace como consecuencia de que siempre nos estamos proyectando y la proyección surge de la resistencia a dejar entrar en nuestra psique la idea de que lo que veo, lo que percibo, en fin, lo que proyecto, forma parte de mí. Esta resistencia crea un vacío en nuestra psique, que a la corta o a la larga se nos puede manifestar en un síntoma físico. Estas son palabras del gran psicólogo transpersonal Ken Wilber.

Cuando alguien se cuestiona su verdad, cuando toma conciencia de que su percepción es pura interpretación, entonces comienza el camino hacia el despertar de la conciencia.

¿Cómo aprendemos a autoobservarnos?, ¿cómo nos percatamos de nuestras falencias y virtudes, para desde allí mejorar nuestras vidas?

Nosotros enseñamos en nuestro método de Bioneuroemoción a desarrollar la capacidad de autoindagación y de autogestión de nuestros estados emocionales. Hay que desarrollar la Conciencia de Unidad, evitando todo juicio, toda crítica, evitando cualquier comentario ofensivo, con la conciencia de que lo que digo habla más de mí que del otro. Saber que lo que más me molesta o me agrada del otro es una información que está en mí; que siempre nos estamos proyectando, y saberlo, nos permite desentrañar los hilos que nos tienen atrapados en situaciones y conductas que no alcanzamos a comprender por qué nos ocurren. Aprendemos a tomar conciencia de que siempre estamos en la mente justificativa, que hay que ir más allá si realmente queremos alcanzar el conocimiento de nosotros mismos, que es la fuente del verdadero Ser.

¿Por qué llegamos a crear y mantener ilusiones? ¿Qué ocurre en el camino que nos encasilla en ciertos roles?

Parafraseando a Anthony de Mello, él nos dice que nuestros apegos, nuestras decisiones, nuestros sufrimientos, nuestras manipulaciones, nuestra necesidad de control, etc., son fruto de nuestra programación inconsciente. Somos menos libres de lo que pensamos; nos queda un hálito de conciencia, la cual nos permite estar aquí y hablar de lo que estamos hablando. Hay lealtades familiares, hay lealtades invisibles, hay silencios, secretos, sufrimientos que yacen ocultos en nuestra psique inconsciente. Tomar conciencia de ello nos permite liberarnos de las cadenas que condicionan nuestras vidas y liberar a nuestros ancestros de información tóxica. Damos un sentido más amplio que permita trascender la información y alcanzar otro nivel de conciencia, otra vibración que nos permita vivir otra vida y sembrar semillas para un mundo más coherente, más en paz.

¿Qué es para ti la libertad? ¿Qué implica ser libre?

Una persona no será libre hasta que comprenda el sentido de su vida. La libertad es la capacidad de gestionar cualquier situación en tu vida, sin que las emociones nublen tu mente y contaminen tu corazón. La libertad implica tener conciencia de que hay un Orden, una Inteligencia, un Diseño Cósmico, que se expresa en la forma de lo que llamamos vida. La libertad es la plena comprensión de que uno es el que tiene el poder de transformar su vida, sin excusas, sin justificaciones y sin explicaciones donde los demás sean los culpables. El sentido último de la libertad es saber que no hay un “cómo”, un “cuándo” y un “de qué manera”. Es resumen, es saber que lo que tengas que hacer, lo sabrás en su debido momento.



La cuna de la enfermedad está en nuestra mente, el cuerpo sencillamente la expresa.

¿Crees que el ser humano puede adaptarse y deberá adaptarse a un mundo nuevo, con problemas medioambientales, alimenticios y de agua? ¿Qué opinas de las voces que señalan que pronto veremos el fin del ser humano? ¿No será el inicio de uno nuevo?

El ser humano vive en el mundo que su conciencia proyecta. No busquemos culpables ni justificaciones. Max Planck —el padre de la mecánica cuántica— ya lo decía: “Lo que importa es la conciencia”. La conciencia es la que crea nuestra realidad, el Campo de Inteligencia Infinito solo expresa lo que nosotros somos capaces de ser.

¿Es necesario el sufrimiento para el crecimiento o es más bien para tomar conciencia? ¿O podríamos saltarnos eso?

Un Curso de Milagros nos enseña que el sufrimiento es algo que la deidad desconoce por completo. Sufrir es un acto egoísta, es no aceptar, es no comprender que todo tiene una razón de ser. Es querer que las cosas sean de la forma que tú quieres que sean. Aquí nace el sufrimiento, que es puro apego. Tengo ejemplos en mi vida de personas que al hacer la Bioneuroemoción, al aplicar el Curso de Milagros, han trascendido el sufrimiento y han alcanzado la paz interior, que es el propósito del mismo. En cada situación, tú tienes el poder de elegir: ser víctima o maestro de cada situación. Aceptar, entregarse a la Conciencia de Unidad, el rendirse a que tú no sabes lo que es mejor para ti ni para nadie, es auténtica iluminación.

¿En qué consiste el Curso de Milagros y por qué le dices libro cuántico?

Es un libro Advaita, que emplea terminología judeo/cristiana. Te enseña a desarrollar la conciencia de que todo está unido e interrelacionado. Te muestra que vivimos en un mundo dual, que es pura ilusión, pues la separación es imposible, pero que es posible que la vivas, por la sencilla razón de que así lo crees. Nos hace tomar conciencia de la importancia que tiene el pensamiento, que tenemos que vigilar nuestros juicios, pues todo ello crea nuestra realidad. Es un libro cuántico, porque te enseña que todo es información y que siempre la estamos proyectando. Te señala que todo lo que nos rodea está relacionado con nuestra conciencia y que todo aquel que está involucrado en una situación desempeña el papel que le corresponde. Todo es vibración, todo es resonancia y todo se complementa. Estos son principios cuánticos.

¿Podemos cambiar nuestra realidad espiritual y emocional? ¿Crees que a través de la voluntad podamos cambiar nuestra realidad física, por ejemplo, frente a una enfermedad o limitación?

El poder está en nosotros, aunque nos enseñan que está afuera. Desarrollar la Conciencia de Unidad llevará nuestra vida a otra realidad. La creencia en la separación es la sede del egoísmo, del miedo, del sacrificio, del dolor y de la enfermedad.  Este cambio no se puede hacer a través de la voluntad. No es un cómo o un qué hay que hacer. Es un estado en que la mente solo percibe lo que es, que todo está unido y todo está interrelacionado. Lo que suceda en el mundo, en un teórico futuro, depende absolutamente del “aquí y el ahora”, pues es lo único que existe: “el momento presente”. La cuna de la enfermedad está en nuestra mente, el cuerpo sencillamente la expresa. Parafraseando a la UNESCO, en su constitución, y para que se entienda bien lo que quiero decir, ella expresa lo siguiente:

“Puesto que las guerras nacen en la mente de los hombres, es en la mente de los hombres donde deben erigirse los baluartes de la paz”.




¿Cómo podemos aquietar la mente, estar en el presente?

El pasado no existe, solamente nos recuerda viejas heridas y muchas experiencias de culpabilidad. El futuro es una incógnita. La mente se enferma, porque se lamenta del pasado y quiere controlar el futuro, y con ello lo único que consigue es repetir los errores. Lo único que existe es el presente y lo contaminamos con cosas que pasaron y con cosas que no sabemos si pasarán. Nuestra mente, con sus pensamientos puestos al servicio de esta paranoia, lo único que consigue es repetir las soluciones a los mismos problemas y a esto le llamamos historia.

Para sanarnos, para estar tranquilos y en equilibrio, ¿qué deberíamos hacer y cómo?

No hay un cómo ni un no hacer. Esto es creer que la solución está afuera, y esta solamente está en nuestros corazones, con la conciencia abierta a las posibilidades infinitas. Si alguien quiere una manera, que es milenaria, pues venga: no juzgues. No lo haríamos si supiéramos la fuerza creadora que tienen nuestros juicios y nuestros pensamientos. Somos demasiado condescendientes con nuestra mente. Hay que estar más alerta con las divagaciones de ella, pues de alguna forma está creando nuestra realidad.

¿Qué crees que falta, o qué debería pasar, para que el mundo cambie o mejore?

No sé la respuesta, pues no hay una sola solución, hay una infinidad de ellas. Yo abogo, como tantos otros, por liberarnos de creencias que nos separan, que nos anulan, que no nos permiten pensar libremente. Debemos comprender que no existiría la luz si no existieran los polos negativos y positivos, que la única verdad es la integración, el dejar de posicionarse como si esta fuera la única verdad. Es necesario liberarse de la necesidad de creer en “tener la razón, la verdad”.

¿Cómo podemos apoyar a nuestros hijos para que, en un mundo cambiante, acelerado, violento muchas veces, logren mantener su centro y no caigan en un sinsentido?

Nuestros hijos viven en el mundo que tienen que vivir. Lo único que podemos hacer por ellos, que es lo que yo hago con los míos, es enseñarles a que, si quieren paz en sus vidas, comprendan que en el mundo dual que vivimos, las polaridades se manifestarán, pues este es su “sino”. Deben aprender a vivir entre los opuestos, saber gestionarlos, sin caer en la trampa del juicio y del posicionamiento a ultranza. Henry Ford nos decía que, si queríamos tener éxito en nuestras vidas, teníamos que ponernos en la posición del otro. Otros pensadores y estudiosos de las ciencias nos recuerdan que la integración de las polaridades nos ofrece la auténtica solución a los problemas.

Fuente: Mundo Nuevo