NO DEJES QUE LAS COSAS TE AFECTEN: EL ARTE DE LA OBSERVACIÓN INDEPENDIENTE





NO DEJES QUE LAS COSAS TE AFECTEN: EL ARTE DE LA OBSERVACIÓN INDEPENDIENTE

En su libro titulado " Una filosofía espiritual para el Nuevo Mundo ", John Price establece los requisitos básicos para alcanzar el estado mental de inofensividad. Uno de estos pasos es el de la observación desapegada: observar con amor incondicional las actividades del mundo que te rodea "como si no fueras parte de ese mundo". Usted es testigo y observa sin juzgar ni etiquetar nada bueno o malo.
Ahora, por supuesto, desde que leí ese libro, parece que he manifestado una instancia tras otra para practicar este comportamiento recién descubierto. Surgieron situaciones desafiantes y, a veces, pude permanecer desapegado y simplemente observar, mientras que otras situaciones parecían arrastrarme sin querer en su confusión.
Decidir permanecer divinamente indiferente y desapegado
Déjame que te cuente un caso que, en retrospectiva, parece bastante divertido... Pensándolo bien, no volveré a acumular toda esa energía negativa. Permítanme decir que me dejé arrastrar, no, corrección, salté con ambos pies en una situación que me dejó echando humo. Entonces, ¡ di cuenta! Vaya, había olvidado mi decisión de permanecer divinamente indiferente y distante. Luego caí en mi reacción automática previa de "¡He sido estúpido y he fallado otra vez! ¿Nunca aprenderé? ¡Nunca puedo hacer nada bien!" (Tú conoces ese canto interno en el que nos metemos a veces...)
Por suerte para mí, mi Ser Superior ha estado llegando a mí claramente y rápidamente interceptó mis pensamientos auto castigadores con una perspectiva más alta: " Oye, te has burlado de esto, pero está bien. Míralo por lo que es, entiende el ¡Mensaje, y déjelo ir! "Así que después de unas cuantas respiraciones profundas y una liberación consciente de la ira y el juicio tanto hacia mí como hacia la otra persona involucrada en la interacción, continué mi día.
Plan de la lección: desapego
No es sorprendente que haya experimentado otra situación en la que probar mi comportamiento recién descubierto (o el plan de mi lección): el desapego. Más tarde esa noche surgió otra situación para poner a prueba mi temple. Esta vez, el escenario era completamente diferente y no implicaba ira, resentimiento e impaciencia. Entró un amigo que se sentía "abatido" y bastante negativo con respecto a la vida. ¿Entonces qué hice? En mi deseo de aliviar algo de su incomodidad, me aferré a algunas de sus emociones y "atrapé" algunas de las vibraciones. Me metí directamente en el bote "oh, pobre de mí" con él, y me compadecí de su estado. En consecuencia, incluso después de que se fue, pasé la noche sintiéndome "fuera de mí".
De nuevo, no mantuve mi rol de observadora y vi que su escenario era solo su elección de un guion de película. En lugar de permanecer como un observador distante, me convertí en un participante.
Por supuesto, no estoy sugiriendo que necesitamos ser de sangre fría. Cuando un amigo necesita una mano amiga o un hombro para llorar, necesitamos estar ahí para ayudarlo. Pero lo que estoy diciendo es que no tenemos que dejarnos enredar en ilusiones de negatividad. A pesar de que un amigo está pasando por su drama, podemos ayudarlo y amarlo, sin caer en la trampa nosotros mismos.
Es un poco como ver una película... Algunas películas se pueden ver, disfrutar, llorar, reír, y luego salir y seguir su camino alegre. Otras películas tienden a atraparte, a arrastrarte el estado de ánimo, y sales con la vibra y la energía que ocupaste mientras mirabas el espectáculo.
Es solo una película
Lo mismo ocurre cuando "vemos" las películas de nuestros amigos (vidas). Podemos participar, llorar, reír, pero mantener nuestra perspectiva distante sabiendo que es "solo una película". El papel que tu amigo ha elegido jugar es precisamente "su elección". Ya sea que haya elegido interpretar a un mártir, a una esposa maltratada, a una esposa descuidada... ella es la que elige quedarse en esa película.
Recuerda que no puedes sacar a nadie de la zanja bajando allí con ellos. Tienes que permanecer en un terreno más alto para poder ser de ayuda. Y sí, les da ayuda si lo desean, pero no ayuda si se embarrara  a sí mismo.
Debemos darnos cuenta de que no solo somos actores en nuestros melodramas, sino también guionistas y directores. ¿No te gusta tu película? ¡Genial! Luego reescribe el guion, cambia las direcciones. Si el guion originalmente decía: "Vivirás con un hombre que te castigará hasta que aprendas a amarte lo suficiente como para seguir adelante", luego acortarás la parte melodramática (las palizas) y pasarás a la parte donde te ames lo suficiente como para dejarlo.
Amarte lo suficiente como para reescribir tu guion
Las películas de nuestros amigos son sus elecciones, al igual que nuestras películas son nuestras. Si constantemente tienes amigos que "agotan" tu energía, entonces no es "su culpa", sino tu responsabilidad al dejar que suceda. Cambia el guion. Haz tu movimiento. Ámate lo suficiente como para hacer un cambio ahora.
La idea de la indiferencia divina y el desinterés amoroso es permanecer siempre enfocados en la Luz de la comprensión espiritual, de que independientemente de la apariencia, permanecemos firmes en el conocimiento de que todos somos seres divinos y que lo que imaginamos nos lo atraemos. Cuando permanecemos alejados, no nos vemos atrapados en la trampa de la ilusión.
Podemos mantenernos enfocados en lo positivo y confiar en que todo siempre funciona para el mayor bien para todos los involucrados... y tomar las medidas necesarias para avanzar en ese camino.
Libro referido en este artículo.
Una filosofía espiritual para un mundo nuevo
por John Randolph Price.
Fuente: Universo Espiritual

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