¿En qué
momento comprenderemos que no somos sólo egos aislados enganchados a un sistema
nervioso electrónico, sino a las células pensantes individuales de un vasto
organismo planetario, cuya mente es igualmente vasta en su alcance y dimensión?
–José Argüelles/Valum Votan
¡Bienvenidos
a la Luna Eléctrica del Servicio del Venado! Esta es la tercera Luna de la Onda
Encantada del Servicio Planetario.
Esta es la
Luna en la que activamos Nuestro Servicio al Gran Entero Planetario. Esta Luna
observaremos alineaciones celestiales significativas y con actividad constante
dentro del Sol.
El Sol es el
director de todo en nuestro sistema solar. Con el reciente eclipse solar y la
intensificación de las emisiones de plasma solar, está ocurriendo un cambio
rápido dentro y fuera. El Sol afecta el clima a través de su radiación solar,
así como a los sistemas de comunicación.
La radiación
del Sol ioniza parte de la atmósfera superior de la Tierra. Esto forma una capa
de plasma conductiva, la ionosfera, el nivel más bajo del campo
electromagnético de la Tierra. Las estructuras principales de este campo son
los dos cinturones de radiación que contienen el banco psi, el panel de control
de la noosfera. El aumento de la actividad solar cambia el campo magnético de
la Tierra el cual interactúa electroquímicamente dentro del cerebro humano.
Nuestro
cerebro es una unidad de interfaz que nos conecta con la “noosfera” la mente
planetaria. La noosfera puede ser entendida como un condensador del “Internet
cósmico” que procesa la estructura del pensamiento colectivo.
El cerebro
humano es un chip de transducción noosférica con un nano circuito hiperorgánico
(sistema de chacras del cuerpo etérico) para la realización y cumplimiento de
los impulsos cósmicos auto-reflexivos. –José Argüelles.
Fuente: Onda Encantada
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