EL AMOR BASADO EN LA RECIPROCIDAD NO SOLO SE TRATA DE DAR, SINO TAMBIÉN DE RECIBIR

 

El amor basado en la reciprocidad no solo se trata de dar, sino también de recibir

 

El amor es un intercambio de sentimientos entre dos personas, por lo tanto, tiene que ver con dar y recibir. No se trata de solo dar y dar y dar. El amor basado en la reciprocidad debe ser mutuo.

Eso sí, no confundamos esto con el amor incondicional, el cual, por lo general, ocurre entre padres e hijos, en donde no importa si esa persona se aleja o se va. El amor en este caso continúa intacto, pues hay un vínculo sanguíneo de por medio.

Sin embargo, en las relaciones de pareja, el amor tiene que ser de dos y debe estar basado en la reciprocidad. Porque cuando es solo uno el que entrega amor, la cosa deja de fluir y tiene lugar el desamor, la obsesión, el apego, el capricho o incluso la infidelidad.

 

El amor basado en la reciprocidad

Antes de hablar de este amor, quiero recordarte algo muy importante y es que tú vales mucho. Así que, si tú no te tienes amor propio, no vas a funcionar en ninguna relación.

Más bien, la otra persona va a percibir que tú no te tienes valor, que no te quieres, que no te das a respetar y se va a aprovechar de ti. Quizás lo haga inconscientemente, no porque sea una mala persona, sino porque tú le estás transmitiendo eso. Le estás diciendo: “yo no tengo amor propio, puedes hacer conmigo lo que quieras”.

Por eso, quiérete, ámate, hazte respetar, siempre coloca límites en una relación para que esa persona conozca tu valor, y para que observes lo increíble que puedes llegar a ser

Solo así, vas a conseguir entablar una verdadera relación de pareja, donde existe el amor y la reciprocidad. Si te amas lo suficiente, tu pareja se dará de cuenta de ello y te valorizará. De hecho, encontrarás que eres importante y va a tener miedo de hacerte daño, porque no va a querer perderte.

 

El amor es de dos. Es dar y recibir.

Cuando el amor es recíproco, puede llegar a ser muy duradero. Puede durar 20, 30 años o más. Eso sí, hay que tener presente que, en algunos casos, por más que parezcan tristes, este amor también se puede acabar.

 

Es muy importante que acepte que nada es para siempre. Por eso, disfruta de este amor mientras sea así: dar y recibir. Mientras sea recíproco este sentimiento, todo fluirá para bien. Pero, si en algún momento esta persona deja de darte amor, cariño, o deja de demostrarte que eres importante para él o para ella, el amor se acabará y deberás aceptarlo. Es ahí, donde deberás volver a tu amor propio, aquel que nunca te abandonará.

Y bien, esa fue la corta lección de hoy. Piensa muy bien en esto: el amor es de dos, se trata de dar y recibir.

 

Por último, te pregunto, ¿Tú que tienes en este momento? ¿Tienes una relación de amor verdadero? ¿Hay un intercambio recíproco de sentimientos en tu relación? deja tu respuesta en los comentarios de nuestras redes sociales. Con todo gusto te leeré.

Por ahora me despido, pero eso sí, no sin antes recordarte que aquí, en reencontrate.com, cuentas con diversos talleres y cursos orientados a tu crecimiento personal y espiritual. No dudes en suscribirte a ellos y sácales el mayor provecho posible, sobre todo, para conseguir bienestar.

Sin más, un saludito.

¡Hasta la próxima!

 Adrián Alberto ∼

Fuente: Reencuentro