Porque una vida más
plena consiste en ir por el mundo con más preguntas que respuestas, te
compartimos una charla con el explorador de vínculos humanos Sergio Sinay.
Vivimos en un mundo
abocado a lo material, en el que los aspectos externos prevalecen por sobre la
exploración honesta de nuestros aspectos internos, de quiénes somos por dentro
y qué nos pasa en nuestra profundidad.
Nos acostumbramos a
mostrarnos de manera permanente y a mirar del mismo modo a los demás.
El apuro diario le gana
a ese tiempo largo que necesitan los buenos vínculos para afianzarse, y las
grandes multitudes se traducen, paradójicamente, en grandes estados de soledad.
La medida del éxito está puesta en el afuera, en hacer y generar: contenidos,
bienes de consumo, entretenimiento, debates superfluos…
La cuestión es
producir, estar, que te vean, ver. Y claro, el alma va quedando apartada. Así
anda una masa crítica de la sociedad: desalmada. Y no es bueno andar desalmados,
porque es como estar mutilados”, dice Sergio Sinay, ensayista y especialista en
vínculos humanos. Y agrega: “Hay soledades necesarias en los momentos de
transformación”.
Pero, ¿qué nos pasa
frente a esa soledad, profunda y dolorosa, que es la ausencia del otro?
El consumo desmedido y
la imposibilidad de construir vínculos reales son la contracara de esa soledad.
“Todo eso nos lleva a una angustia muy grande, a un agujero negro en el alma,
en el centro del ser que se trata de llenar desesperadamente con algo”, en
palabras del especialista.
La búsqueda de sentido
Tal vez, antes que
nada, sea bueno comprender de qué hablamos cuando hablamos de buscar. Para eso,
Sinay nos trae las palabras de Thomas Moore: “Él dice que el alma pide a los
gritos que la embarres. Que la metas en el mundo. El alma no pide estar
planchada, limpia y almidonada, guardada en un estuche a salvo de las
vicisitudes de la vida, sino que pide estar ahí donde transitamos todos los
días, donde sufrimos y gozamos”.
¿Cómo sacudimos el alma
para lograrlo? ¿Por dónde debemos empezar a indagar? Para responder a esas
preguntas;para comenzar cuanto antes con la propia búsqueda, te compartimos la
entrevista completa a este hombre convencido de la importancia de recorrer los
caminos que nos llevarán al alma. La invitación es a andarlos despiertos y
llenos de preguntas. ¿Te animás?
Fuente: Sophia on line
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