GEOMETRÍA SAGRADA .EL LENGUAJE DE LA
LUZ
La geometría, tal como la conocemos y
utilizamos en nuestro día a día, nos ayuda a definir espacios, como por
ejemplo, medir la extensión de parcelas, y crear mapas o definir el movimiento
o las propiedades de objetos, como la trayectoria de un misil en el aire o para
estudiar el movimiento de los cuerpos celestes como ocurre en la astronomía.
Ya en el antiguo Egipto tenían unos
conocimientos muy amplios de la geometría, necesarios para alzar esos
impresionantes edificios, sino que ademas entendían y utilizaban la geometría
de las formas para tener un impacto en su entorno, por ejemplo, la construcción
de pirámides y la conservación de cadáveres en su interior.
Y es entonces cuando el concepto de
geometría se vuelve sagrada, cuando nos damos cuenta que la geometría
constituye un molde representativo de cómo se manifiesta la vida en el
universo, en lo que nos rodea, en nosotros mismos, de forma fractal, siguiendo
los mismos patrones geométricos a todos los niveles de la creación, desde lo
mas pequeño, ya sea un átomo (microcosmos ) hasta lo más grande ya sea una
galaxia (macrocosmos). Dándole coherencia y forma a las leyes universales de la
creación y de las cualidades del Espíritu.
Así, penetrando en su significado
profundo, abrimos nuestras mentes a nuevas perspectivas, permitiéndonos
explorar el lenguaje simbólico y darle una comprensión mental a nuestro
entorno, a nosotros mismos a las cosas que ya intuimos. La perfección del
universo esta codificado en cada partícula de nuestros cuerpos. Al ser
participes en la manifestación de la creación, apoyamos el fluir del gran Plan
Divino en todas sus expresiones de vida posibles, en el que Somos y dejamos de
Ser para disolvernos en la magnitud de la totalidad y de la no- nada. Es en
este camino de reconocimiento de nosotros mismos, que conocemos a Dios.
Hemos dejado de lado el profundo
significado de estas formas, que esconden en sí mismas el misterio de la
creación de la vida. Volvamos a nuestra esencia, a lo autentico, a nuestros
corazones, a nuestra naturaleza de Luz, respondamos a la revolución de nuestro
espíritu!
La creación juega a transformarse de
una forma a otra intercambiando el masculino icosaedro y el femenino
dodecaedro, y pasando también por los otros sólidos platónicos. A medida que ha
ido pasando el tiempo, la geometría se
ha convertido en un estudio matemático de los espacios físicos, de las formas,
los tamaños y relaciones de objetos físicos en ese espacio, olvidándose su
significado espiritual.
Hay SIETE formas principales que
responden a la Geometría Sagrada : los
Sólidos Platónicos , el Circulo y la Espiral.
Los
Sólidos Platónicos son figuras simétricas, y mantienen unas
características particulares:
Tienen todos los lados iguales.
Todos los ángulos iguales.
Todos caben dentro de la Matriz
Universal que es el circulo.
a.TETRAEDRO Tiene 6 aristas, 4 caras
triangulares y 4 vértices.que es un triángulo con base. Representa la
conciencia del fuego. Símbolo de la SABIDURÍA por representar al fuego sagrado,
el primer elemento. Tiene su
correspondencia en el 3er chakra.
Función clave: Manifestación.
b.El OCTAEDRO de 12 aristas, 8 caras
triangulares, 6 vértices. Representa el aire, es como 2 pirámides invertidas
unidas en sus bases. Símbolo de la PERFECCIÓN DE LA MATERIA POR EL ESPÍRITU.
Conectado la Chakra Cardíaco
Función clave: Integración.
c.El ICOSAEDRO con 30 aristas, 20
caras triangulares, 12 vértices, es la conciencia del agua. Representa la
semilla de la vida, la forma del universo, es lo masculino.
Conectado al chakra Sacro.
Función clave: Transformación.
d.El CUBO con 12 aristas, 6 caras
cuadradas, 8 vértices representando el secreto del mundo natural. Es la
conciencia de la TIERRA, es la experiencia de lo que ha nacido de la
naturaleza.
Conectado al Chakra Raiz.
Función clave: Estar asentado,
conectado con la vida, clarifica nuestros propósitos en el plano físico.
e.El DODECAEDRO con 30 aristas, 12
caras pentagonales, 20 vértices, representa el quinto elemento (eter, prana,
chi).Considerado el poder femenino de la creación y la FORMA MADRE.
Chakras (6to, 7mo & más altos)
Función clave: Ascensión &
Misterio
La espiral
Todos los cuerpos platónicos se
complementan con la espiral. La espiral es la figura geométrica que crea la
corriente evolutiva de la materia hacia su expresión mas elevada y viceversa.
Generándose así dos corrientes energéticas, una receptiva y otra reactiva. Una
energía femenina y otra masculina. La energía masculina proyecta toda la
energía en un impulso creativo de manifestación hasta donde pueda abarcar, la
energía femenina nos permite captar e integrar la información del Universo. De
esta manera se crea un flujo constante de energías que lo forman todo ser en
plena expresión y evolución consciente. La espiral une y transporta todos los
cuerpos geométricos a través de los diferentes planos de evolución. El ejemplo
perfecto: el ADN
El círculo
Volviendo a las siete formas
principales que comentamos al principio vamos a desarrollar la geometría del
círculo representante de la forma de Dios, la unidad y la totalidad. El círculo
intacto significa la eternidad.
El círculo integra aquellas formas
diferentes entre sí para interrelacionarlas en la unidad. El centro verdadero
del círculo es un punto, pero el punto carece de dimensión y de lugar por lo
tanto escapa a nuestra percepción y capacidad de manifestación. No pertenece a
nuestro mundo, porque en nuestro mundo todo tiene extensión, dimensión, porque
el mundo es forma, pero el punto pertenece a otra escala del ser. Existe más
allá del mundo, Es metafísico en el sentido más literal. El punto simboliza la
unidad, la totalidad, la perfección. El punto lo contiene todo, sólo que en
potencia, no manifestado. De él nacen el círculo y la esfera que son las formas
en las cuales se revela el punto. Lo que en este es todavía potencia metafísica
cobra configuración formal en el círculo y la esfera. Todos los cuerpos
Platónicos son distintos y en realidad constituyen la unidad el círculo.
Podemos observar estas figuras
geométricas como simples patrones para la manifestación de la materia en las
plantas, en los minerales y en las personas. Pero si nos paramos a observar la
evidente armonía en las proporciones que compartimos, que también vemos en el
movimiento de los astros o en el crecimiento de las ramas de un árbol, o en la
expansión de unas ondas en el agua, irremediablemente esto nos traslada a un
sentimiento de pertenencia al mundo natural pero al mismo tiempo nos hace
participes y conscientes de la responsabilidad que poseemos como seres multi
dimensionales, de apoyar la evolución fractal de la vida a través de nuestra
experiencia responsable, capaces de actuar nosotros mismos como moldes
representativos de la manifestación de la vida que traspasa a través de
nosotros. Este es un gran privilegio, y un gran regalo, de poder ver y sentir
fluir el maravilloso flujo de la vida pasar a través de cada partícula de
nuestro ser, y poder conectarnos mediante nuestra intención, y acción de
nuestro espíritu con el propósito de la vida, haciéndonos asi, co-creadores
conscientes del plan Divino.
Fuente: Universo Espiritual
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