Por lo tanto, en la acogida, en este instante, sea cual sea el instante o el momento en que me leas o me escuches, el milagro de una sola cosa, la Verdad, se despliega en tu presencia.
Entonces, en este espacio de comunión, en este espacio que crea la consagración permanente de la Alegría, Abba en ti, se expresa. Como te dije, no hace mucho tiempo, no solo en palabras, sino en el intervalo de la palabras, entre el silencio presente entre cada palabra, siempre me revelo más, para que la Alegría se convierta en tu Evidencia de todo tiempo, la Evidencia de tu presencia, así como en la Evidencia de tu ausencia, donde no hay diferencia, donde todo es perfecto, donde nada puede carecer.
Desde este lugar, común para ti y para mí, escuchamos el surgimiento de interrogantes y preguntas, sean las que sean. Si fueran de la persona, incluso si fueran de tu conciencia, poco importa. Porque más allá de mis respuestas, como de tus preguntas, más allá de cualquier palabra, se realiza esto. Esta Alegría inefable, que no depende de ti, ni de mí, sino simplemente, y precisamente, de la Evidencia que está allí.
Así que te invito primero, antes de oír o escuchar lo que tienes que decir, interrogar, o preguntar, dejar lo que siempre ha sido, transparentarse y aparecer, más allá de mí, como más allá de ti, la Verdad inefable. Donde nada puede carecer, donde todo es perfecto.
Así que, si lo desea, permitamos que las preguntas y las respuestas tengan lugar, en el mismo silencio entre mis palabras, en la misma Evidencia.
Entonces, te estoy escuchando con tus primeras preguntas.
— Pregunta: Amado Abba, ¿cómo puedo encontrar el punto cero?
Amado, hoy no puedes buscarlo, porque no lo vas a encontrar. Solo puedes acogerlo, lo que, por supuesto, en este acto de acogida, pone fin de inmediato a cualquier proyección de tu conciencia, así como a cualquier interrogación fuera de ti, porque en definitiva, en Alegría y la Evidencia, no hay ni dentro, ni fuera, sino la misma Verdad que transparenta todos los aspectos, desde la conciencia como desde el espacio, así como del tiempo. Así es como encuentras el tiempo cero, jamás ha desaparecido, más sin embargo, cada noche que vives, obviamente en lo que llamas tu sueño. Pero hoy, esto se transparenta a través de tu persona, así como de tu conciencia, para tomar, por así decirlo, el relevo de todo cuestionamiento, como de cualquier forma.
Así que olvida que debes encontrarlo, porque es él quien te encuentra y no eres tú quien lo encuentra. En esto, solo hay una postura que puede ser efectiva que es seguida por el efecto. Esto es simplemente para estar listo para lo Desconocido, al aceptarlo, sin saberlo, para finalmente permitirle reconocer, más allá de cualquier apariencia, cualquier historia, así como de cualquier rol.
Entonces solo puedo invitarte a coger. Porque la respuesta ya está ahí. Pero ninguna persona puede apropiarse o vivirlo. Y es precisamente cuando cesaron todas las inclinaciones, comprensión, experiencias o visiones personales, en este vacío tan espantoso para el ego y la persona, que se revela lo inefable. No hay otra alternativa, no hay otra solución, que desaparecer de uno mismo, como del yo, con el fin de transparentar y aparecer en esta Verdad Desnuda. Reconociéndote en Ella, sin buscarla, entonces, de hecho, encontrarás, a través de tu persona, como a través de todos los diferentes fragmentos de tu conciencia que eres uno, para encontrarla. Nada en este nivel, que provenga de la Nada, puede interferir con lo que hay allí. Acéptalo en principio, y especialmente después, compruébalo tú mismo.
En esta noción de acogida y de acoger, es conveniente que comprendas que no se trata de acoger a través de la persona, sino simplemente de colocarte más allá de todo personaje y de cualquier referencia, con el fin de estar disponible, en Verdad, con la Evidencia, que siempre ha estado ahí. Entonces no puedes actuar, no puedes deshacerte de ti mismo, solo acordar estar en la acogida. Dar la acogida a lo desconocido, dar la acogida a lo que se presenta, y no solo con respecto a este interrogatorio o cuestionamiento, sino, en cada mirada, cada acción emprendida, incluso dentro del efímero más cotidiano. Que esto aparecerá en ti.
Es hora, ahora, de alguna manera, de poner fin a cualquier tensión, y aceptar que cualquiera que sea la apariencia que te da para vivir tu conciencia, como tu cuerpo, más allá de esto, más allá de lo que tienes que vivir, existe la Verdad. Y eso, es precisamente, lo que se debe vivir, ya sea a través de la felicidad o del sufrimiento, no cambia nada. Porque la Evidencia está ahí en el momento en que la acoges. La recepción se acompaña sistemáticamente del don sí. El don de sí a la verdad. Pero no tienes que pensar en dar nada, si no es para donarte a ti mismo, a este Desconocido que siempre ha estado allí. Porque hoy, no hay más velos. Porque hoy, ya no existe ningún freno que pueda sostenerse u oponerse indefinidamente a la Verdad instalada y revelada.
Y sea cual sea su ubicación en este día o este instante, sea lo que sea que viva o no viva, solo la comprensión de esta noción de acoger todo lo que aparece, tanto en el cuerpo como en la conciencia, crea la dinámica de la travesía. Lo que te permite entrelazar, entremezclar con lo efímero y lo Eterno y reaparecer en la Verdad Desnuda, a pesar de la presencia de ese cuerpo, a pesar de la presencia de este mundo. comprendiendo entonces que eres el Camino, la Verdad y la la Vida. Y que estás en este mundo, y que no eres de este mundo, y simplemente estás allí. Como cuando duermes, una noche que no se ve perturbada por ningún despertar, sueño o pesadilla, esa noche profunda, donde no hay más que olvido y la Nada.
Ya que es precisamente el olvido y la nada de toda veleidad personal, como de cualquier indicio de individualidad en un plano cualquiera, cualquiera sean las condiciones de la acogida total y completa de lo que eres que, sin embargo, aún no conoces, incluso si has vivido por momentos o instantes. Pero de lo que hablo no es de una experiencia, o incluso de algo que pasa, sino de la simple Verdad, antes de la conciencia, como de toda forma, como todo el mundo, lo que crea esta indescriptible Alegría sin objeto y sin nadie, que solo puede reconocerse, porque ella no pasará. Solo puede magnificarse, intensificarse y desplegarse con cada soplo, con cada mirada, como con cada acontecimiento, cualquiera que sea su naturaleza o intensidad.
Entonces te habrás encontrado en este momento cero. Y solo podrás decir, como te digo, que siempre ha estado allí y que simplemente las circunstancias de este mundo, como las circunstancias de su vida, han oscurecido de alguna manera, esta percepción. Esta percepción, además, es la percepción última, una que ya no necesita sentir o experimentar, a través de ninguna energía o visión en absoluto, pero que se instala de manera irreparable y definitiva en esta Alegría. Como la Alegría es anterior a la manifestación, la Alegría de estar en el no-ser, como la Alegría del no-ser dentro del ser, es la única Verdad. Muchas hermanas estrellas te lo han explicado extensamente y lo han demostrado ampliamente con sus vidas.
Y hoy, en estos tiempos tan intensos, que tienen que vivir en el plano de la encarnación en la Tierra, todo esto está de libre acceso, en totalidad. Porque como te dije, esto es debido, y es realmente el cumplimiento del Juramento y la Promesa, lo que permite, como dije, sentar y amplificar la manifestación colectiva de la Alegría. No pienses en tus estados de ánimo, no te detengas en la ira del mundo, en los elementos, porque solo despejan el camino y la ruta de lo que parece tienes que pasar, solo para reencontrarte donde jamás se movió nada. Y en última instancia, donde siempre has estado, donde no puede haber nacimiento, ni muerte, ni humor, ni mundo, ni siquiera la más mínima conciencia. Así es lo Eterno que viene, en una forma de sí mismo y, por supuesto, para suplantar todo yo personal. Entonces esto pondrá fin al juego.
Entonces, como dijo Bidi, verás por ti mismo que jamás ha habido un espectador, que jamás ha habido un actor, que jamás ha habido escenario, y que jamás hubo un teatro, y que esto estaba pasando, como un sueño que se va y se desvanece desde el momento en que te despiertas. Lo mismo ocurre con la Verdad, que viene a poner fin a todo lo que pasa, a todo lo que no puede persistir ante la Evidencia de la belleza y en la Evidencia del Amor, cuya traducción es esta Alegría, porque no existe otra parecida. Porque nada puede igualarla, porque nada puede acercarse a Ella.
Así es tu estado dentro de la Presencia Última, de lo que fue nombrado en algunas lenguas antiguas Shantinilaya, donde todo lo que llega y sucede en la pantalla de la conciencia no puede ser interceptado, porque todo se atraviesa con la misma la gracia y la misma ligereza, poniendo fin a toda pesadez, así como a toda densidad. Primero que nada en cada uno de ustedes, y cada vez más importante a nivel colectivo. Entonces llegará el momento del evento que, como lo ves donde mires, ya está llamando a la puerta.
Por lo tanto, no busques el tiempo cero, porque no se puede buscar. Porque tan pronto como lo buscas, como sabes, hay una distancia que se crea, y si se crea distancia, entonces no puedes ser lo que está distante, solo puedes ser lo que ya está allí, y que siempre ha estado allí, a pesar de todas tus apariencias, a pesar de todos tus sufrimientos, a pesar de todas tus preguntas, y de todas tus interrogaciones. Entonces tú también, podrás decir, soy el Alfa y la Omega, el Camino, la Verdad y la Vida, más allá de cualquier rol o función. Por tanto, podrás vivir la Vida, a través de tu Vida, sin obstáculos y sin conflictos, dentro o fuera, porque no habrá diferencia entre el amigo o el enemigo. No habrá diferencia entre el sufrimiento y la abundancia, lo que no cambiará en nada lo que Eres.
Entonces el Soy Eterno es vivido, sin dejar espacio para el menor sufrimiento, donde todo será calificado como correcto, porque no puede ser de otra manera en el corazón de la belleza y la Alegría, y del Amor vivido. Ninguna apariencia ya no puede engañarte, ni llevarte a ningún lado. Entonces tu Vida se convertirá en Evidencia, cualquiera que sea tu edad, y lo que pueda quedar de lo que he llamado hábitos. Entonces serás libre, en totalidad, sin depender de ninguna forma, ni de este mundo, ni de este cuerpo, ni más dependiente del evento colectivo, pero entonces participarás en gran medida en el establecimiento de este colectivo, sin hacer nada, sin querer nada, sin preguntar nada, simplemente estando allí, inscrito en la Eternidad de la Alegría. Cualesquiera que sean las experiencias, lo que sea que percibas, no hará ninguna diferencia. Y en ese momento, que depende solo de ti, en el momento en que aceptas, sí puedo decir, que dejas ir todo, no lo que es exterior, no hay cuestión de irse donde quiera que sea, pero simplemente para dejar ir todo lo que puedes creer concerniente a lo que eres, aquí, en este mundo, como en todo mundo.
Entonces la Conciencia Desnuda, así como el Amor Desnudo, se revelarán aquí, a través de este cuerpo, mostrándote que no hay distancia, ni separación, en ningún mundo, sea lo que fuere, cualquiera hubiera sido la anomalía. Hoy, ya no existe, lo más difícil para ti hoy es aceptar que, más allá de todo sufrimiento, así como de toda insatisfacción, que existe, a través de este sufrimiento, como de esta insatisfacción, una posibilidad mucho más amplia de lo que puedes creer, pensar o imaginar, para revelarte a ti mismo, más allá de todo artificio, de todas las técnicas, como de toda memoria, como de toda proyección. Entonces serás libre. No solo el liberado vivo, sino el liberado, que no depende de la vida o la muerte, porque está inscrito más allá de la vida y la muerte, así como más allá de todo ciclo, así como más allá de toda dimensión.
Recuerda, simplemente, que no se debe hacer ningún esfuerzo y que, desde el momento en que te parece que debes esforzarse, no puede ser verdad. Porque la Verdad jamás será un esfuerzo, sino más bien una relajación de todo esfuerzo, voluntad y sentimiento de posesión. Recuerda, no eres ese cuerpo, y sin embargo, vives dentro de él. Así que no importa los nombres, no importa las palabras, porque lo que intento decirte a través de mis palabras, está mucho más inscrito en el silencio de mis palabras y entre mis palabras. Y si aceptas esto, entonces no hay nada más que decidir, querer, emprender. Porque si aceptas mis palabras, como mis silencios, entonces dejas espacio para la Evidencia. Y dejas espacio para el Soy Eterno, independientemente de toda la creación y toda conciencia.
La verdadera felicidad, la verdadera completitud, sólo puede estar allí, y en ninguna otra parte. Y como saben, miren a su alrededor, son cada vez más numerosos, así como lo han expresado algunas estrellas, hace muchos años, a las que pueden referirse, si lo desean, porque todo esto lo vives y todo esto es viable ahora, en estos tiempos particulares, por supuesto, que ha sido establecido de antemano. Esto ya no es una enseñanza, pero es, de alguna manera, diría, para algunos de ustedes, puntos de referencia, para aquellos que todavía necesitan estar en este abandono y en esta acogida, que no conoce límite, donde nada puede ser calificado, ni bueno, ni incalificable.
Porque no existe diferencia para el que es el Soy Eterno. Y no puede existir ninguno en medio de la Verdad. Todo lo demás es parte de lo que es natural, lo que está sucediendo, así como la semilla que se abre un día y se convierte en un árbol. Todo estaba incluido en la semilla, y la semilla no puede dar otro árbol, más de lo que está inscrito en su programa. Y su programa es tan vasto que incluye todos los demás programas, desde el amigo, como el enemigo, hasta el que murió, hasta el que mira desde la Fuente, a través de las Madres Genetistas, hasta al niño que muere de hambre y del sufrimiento que a veces afecta a tu cuerpo. Aceptar eso es poner fin a la diferencia y poner fin a cualquier distancia. Y repito, no hay otra manera. Ninguna otra, hoy. Todo lo demás sólo puede distanciarte. Todo lo demás sólo puede privarte de la amplitud de Alegría que está ahí.
Como dijo Bidi, que es ampliamente sobrepasa lo que podría llamarse la espiritualidad, ya que es ampliamente superior a todos los juegos de la conciencia. También lo es la a-conciencia (ndt:antes de la consciencia), así es la Verdad de la Alegría. Nadie puede ser engañado excepto aquél que no se ha reconocido completamente a sí mismo. Pero esto puede darse, sin duda, desde el momento en que acojan, ya que en la acogida, en este acto de acogida, hay una entrega total de sí. No hay otra manera de darse a todo lo demás, sino son meros artificios, o sustitutos. Nada puede sustituir a la Evidencia de la Alegría, que es para todos y cada uno, independientemente de su edad, sin importar el sufrimiento, sea cual sea la situación. Y notarás muy rápidamente, que tan pronto como sueltas toda búsqueda y toda demanda en ti, —no estoy hablando de tus preguntas, porque son lógicas—, así en ti, habrá todo el espacio necesario para acoger lo que está ahí.
Se vacía a sí mismo lo suficiente, porque no es una ascesis, ni un trabajo, ni incluso una práctica, sino una postura de la conciencia que te permite dejarte absorber, por lo que eres en verdad. Pero no puedes actuar desde la persona, o incluso desde tu conciencia. Solo puedes actuar aceptando la Alegría, incluso si no lo vives. Porque esto es posible, observa a tu alrededor, se transmite, incluso si sólo eres tú quien puede abrir la puerta, a medida que contemplas que jamás ha existido puerta, sino en tus construcciones, tus hábitos, tus creencias o tus proyecciones. Pero no importa, porque el juego se ve. Y se verá, cualesquiera que sean las circunstancias, de manera cada vez más clara, de modo que cuando llegue el momento, colectivo, nadie puede decir que no lo sabía, nadie puede decir que esto no era Verdad, porque esto es imposible.
A través de lo que has vivido, de lo que has pasado, cualquiera que hubiera sido la intensidad, de la Alegría o del sufrimiento, todo esto solo te ha conducido a donde estás Ahora, en este espacio de resolución, que es la Tierra, de todos los antagonismos y todas las historias, que es el espacio del banquete, no solo del banquete celestial, sino del banquete del cielo y de la Tierra, donde la ofrenda en sí misma te restaura mediante el don, a tu verdad inalienable, donde no hay distancia, donde no existes más que lo que te enfrenta, amigo o enemigo, cerca o lejos donde la mirada es la misma, además de mirar una flor, mirar el cielo, mirar al enemigo, o al amigo, todo lo que pertenece a lo que pasa. Esto no es un concepto Esta puede ser una idea inicial. Pero esta es la Verdad, que es vivir, todo lo demás se hace sin ti, sino a través de ti. Todo se hace sin tu conciencia, pero a través de tu conciencia, sea lo que sea.
...Silencio...
Amado, puedes continuar.
— Pregunta: Cuando hablamos de respirar en tres tiempos, de hecho hay cuatro tiempos: inspiración, pulmones llenos, exhalación y pulmones vacíos. ¡Y cada tiempo dura tres tiempos! O tres segundos...
Amado, la respiración del corazón puede establecerse en un infinito número de tiempos, pero debe entenderse que estos tiempos están situados en la respiración y en la exhalación. No se trata aquí de la pausa entre la inspiración y la exhalación, ni siquiera de un tiempo, entre la expiración, o al final de la exhalación, como al final de la inspiración. Aquí se trata de una inspiración que ocurre tres veces o varias veces, y una exhalación que sucede en el mismo número de tiempos. Esto se llama respiración del corazón, pero esto, al vivirlo, para muchos de ustedes, también es la respiración de la conciencia y de la célula, hablo de las células de su cuerpo, como de la célula original, la primaria. Debido a que este ritmo no puede ser de dos tiempos, porque todo lo que es de dos tiempos es incompleto, el ternario, la Trinidad, cualquiera que sea el medio cultural de donde se encuentre, o espiritual, es el misma cosa. Eso es lo que crea la Vida. Los dos no crean vida. Los dos son el antagonismo necesario e indispensable de la manifestación, incluso dentro de los mundos libres. Pero esto no se trata de la dualidad.
Mientras existe, hoy, a nivel de la Alegría, incluso dentro de este cuerpo donde se imprime la Alegría, porque no sucede exactamente como lo explicó la fisiología conocida, sea cual sea el nivel de estudios. La respiración ya no se realiza en dos tiempos, sino en un ritmo profundamente diferente, que es, diría, de alguna manera, el ritmo de la Libertad, el ritmo de la Evidencia y simplemente el ritmo de la Alegría. Y esta Alegría no es ni siquiera a través de tu persona, a través de tu conciencia o de tu cuerpo, sino que está inscrita en cada una de tus células, de modo evidente cambiando la constitución. Entonces, por supuesto, no te preocupes por cómo respirar esta vez, solamente del instante presente, y la Alegría del instante, instala eso, por supuesto. No puedes obligarlo, aunque si puedes imprimirlo, en ti. Y creo que te lo explicarán en el Satsang, porque será más fácil que durante mi intervención en este momento.
Entonces la respiración, del corazón, es la respiración de la Vida, simplemente. Pero esta respiración no obedece a los tiempos sucesivos de inspiración y exhalación, o las pausas, como dices, entre los dos, o al final de la inspiración, o al final de la exhalación, sino está en el momento de la inspiración, porque tienen lugar una cierta cantidad de tiempos, como en el momento de la exhalación. Esto es lo que crea, si puedo decir, a través de ese cuerpo, el nuevo ritmo de la Evidencia, el ritmo de la Vida, que no depende de ti, ni de ningún mundo, porque estás en ese cuerpo, lo sabes, en donde la alquimia final se realiza. Es en este sentido que hoy, necesitas, más urgentemente, todos los días, estar presente en ti, estar presente Aquí y Ahora, totalmente, de modo que el Aquí y Ahora no esté correlacionado a ninguna memoria, a ninguna historia, así como a ninguna proyección. Porque todo está allí, en el tiempo cero.
Y la Alegría tendrá como marcador, por supuesto, que solo podrás sentirlo y vivirlo, esta respiración del corazón, donde todo lo que está en ti, Te Es Dado, de la misma manera, que con las palabras, el atención, los pensamientos, ojos o gestos, porque cuanto más das, más recibes, y cuanto más recibes, más das. Porque nada se retiene a través de uno mismo o de la conciencia. Es al convertirse en esta copa porque fluye libremente todo lo que quiere entrar allí, porque descubres más allá del contenedor, más allá del contenido. Que también es Alegría, que se vuelve más y más soportable, más perceptible, y, sobre todo, llega sin razón, ni espera una oportunidad, ni ningún deseo de tu parte. Sino que este ritmo del corazón, esta respiración del corazón como de la Alegría, se establece a partir de sí mismo, desde el momento en que no comprendes, o no buscas comprenderlo o retenerlo. Entonces, como se ha dicho, nunca más volverás a tener sed. ¿Qué se puede perder en este ritmo de la Vida que trasciende todas las formas, así como todos los mundos?
Así que se natural, en cualquier forma que te veas, ya sea en un amado hermano, en el enemigo, en el que juzgas, como en la naturaleza, como en cualquier reunión, no te olvides de retirarte de ti mismo, no para emitir ninguna idea, ningún pensamiento, ningún juicio, sino para dar la acogida, cada vez más, a lo que la vida te da a vivir, ver, sentir. Que estés en la plenitud, o no, no cambia nada, porque todo es solo un pretexto y una oportunidad, para la revelación de este nuevo ritmo que es el de la Vida Libre, que no depende de la conciencia, incluso si atraviesa por todas las conciencias.
No puede existir mayor satisfacción en términos humanos, ni mayor plenitud, ya que jamás se puede quitar, nunca puede restringirse o limitarse. Solo existe el juego de tu persona, que se deja respirar por esta Alegría, que todavía se puede ver, pero con una sonrisa, sin juicio, con la misma aceptación. Debido a que sólo puedes aceptar y darle la acogida, pero no puedes mirar, no puedes hacer ambas cosas al mismo tiempo. Y desde el momento en que dedicas más tiempo a la búsqueda, ya sea en duración o intensidad, escuchando y acogiendo con beneplácito, entonces se aleja y se crea resistencia, y la pregunta surge. Considerando que desde el momento en que aceptas estar allí, simplemente, das rienda suelta a la Vida en ti y a tu alrededor, te encontrarás en la totalidad, y no a través de un ascetismo, o cualquier cuota, o cualquier regla que sea.
El amor no tiene reglas ni una lógica cognoscible en este mundo, y sin embargo, como ya te hemos dicho, la Luz es inteligencia. Esta inteligencia nunca puede ser la forma de una entidad, de cualquier dimensión, y está bien antes de cualquier dimensión, como de cualquier creación. Así que solo puedo invitarte, como a todos, a dejar que sea lo que siempre ha estado allí. No se puede mezclar nada personal, nada con el individuo, porque no proviene de una persona, un individuo o incluso de un mundo, cualquiera que sea.
...Silencio...
Amado, puedes continuar.
— Pregunta: (Se trata de una hermana que no está presente.) En mi aura, a menudo tengo una gran cantidad de seres, entidades, y no me doy cuenta de inmediato. Esto me cansa. Cuando me doy cuenta, los acojo en mi corazón. ¿Cómo manejar esto? ¿Es este un proceso normal para verificar todos los días? Gracias por tu iluminación.
Amado, la percepción dentro de lo que llamas aura o cuerpo sutil, entidades, no son solo unos pocos, está todo el universo y el conjunto de creaciones que, hoy en día, hoy, se sitúan en lo que llamas auras. Y tú mismo lo dices, desde el momento en que lo acoges en tu corazón, entonces estás en paz. Entonces todo lo que tienes que hacer es atravesar esto. Esto significa, una vez más, no tratar de identificar ninguna entidad, porque todas estas entidades, sean las que sean, en última instancia, sólo están allí para ser amadas, y atravesar tu persona y reunir, como lo dices, el corazón de tu corazón, para volver a ponerlo en su lugar apropiado, en el Corazón del Corazón.
Por tanto, no hay que quejarse o tratar de comprender, sino simplemente magnificar el sentido de la acogida, la acogida incondicional de todo lo que es visto, todo lo que es percibido, simplemente con el fin de atravesarlo, y durante esta travesía, para permitir que estos elementos se unan a la Luz, en el centro de tu corazón, ante la Luz misma. Todo se celebra así. Y esto sucederá de una manera cada vez más constante para cada uno de ustedes, sobre la Tierra, de la misma manera, hasta el apogeo, si puedo decir, que será el evento colectivo en sí mismo.
Entonces, puedo decirte que no tienes que discriminar nada, sino reabsorber todo lo que se percibe, se siente y se vive, más allá de tu personaje, a través de este punto llamado Corazón del Corazón, y todo sucederá por sí mismo. Y si ese no parece ser el caso, entonces simplemente quiere decir que todavía hay una pequeña distancia, en comparación con la realidad de la acogida, que no debería, te recuerdo, tener ninguna diferencia. Desde el momento en que acoges de la misma manera, una rosa, así como un insulto, entonces, realmente, serás libre. Ya no estarás en reacción, ni en oposición, sino que realmente estarás en la transparencia, que es la más propicia, a través de la humildad del camino de la infancia, para iluminar todo lo que debe ser, para borrar todo lo que acaba de atravesar, incluso si se quedó en tu cuerpo y en tu conciencia, terminando tu historia, como cualquier otra historia, colocándote, como dije, en esta ligereza, a la que nada puede acercarse.
Entonces la Alegría será tu vida diaria, sea lo que sea que pase en tu cuerpo o en la pantalla de tu conciencia, sea cual sea el evento de este mundo, lo que sea, dije, abundancia, o cualesquiera que sean las restricciones, no importa. En ese momento, te das cuenta concretamente de que tu reino no es de este mundo, ni de ningún mundo, sino que es anterior a todo mundo, incluso si existen, de hecho, innumerables moradas, encontrando de nuevo el origen de tu primera morada, todas las moradas son tuyas, y realmente eres Eso. En ese momento, en esta Alegría, solo queda Amor, pero no hay amor que pueda conocerse en este mundo, sino simplemente por la actitud de la acogida y el don de uno mismo, que te permite reconocerte, te lo he dicho, en el amigo como en el enemigo, en la flor como en el grano de arena, o incluso en la acción de los Elementos. Nada se puede separar, en ti, y ya no se separa en ti, entonces serás libre, en totalidad, y nunca más el brillo de tus ojos cambiará, y nunca más tu boca podrá dejar algunas palabras ofensivas para ti o para cualquier persona, porque habrás ido más allá del juego de la dualidad y habrás trascendido cualquier juego de conciencia.
Pero esto no lo puedes hacer tú solo, sino acogiendo y dándote a ti mismo, en su totalidad. Haz pasar el otro antes que tu, coloque todo lo demás delante de tu persona, interiormente, y verás los efectos cada vez más impactantes en el despliegue de la Vida en ti y en tu propio emplazamiento porque ya no dependes del cuerpo, ni de este mundo, ni de ningún mundo, sino firmemente anclado en este cuerpo, permitiendo que la Luz funcione, no solo en ti, sino en todos los mundos. Así es como puedes participar, si puedo decir, de la manera más simple, en la revelación total de esta Verdad Última. Todo lo demás son pasatiempos, el resto son momentos inútiles de sufrimiento, todo lo demás, ya sabes, solo puede pasar.
Así que no te doy una técnica o una práctica, pero te muestro, para que demuestren cuál es el juego de la conciencia, que los conduce a lo que es anterior a la conciencia, donde nada se puede perder de ninguna manera, lo que sea que te falte, en este mundo, ya no hay ninguna falta que pueda sentirse. Para ver con la misma mirada, con la misma intensidad, sabrás, de manera instintiva y directa, sin ningún entendimiento y sin ningún sentimiento, de cualquier naturaleza que sea, que lo que eres es la Verdad, y que nada se puede agregar otro ello. Porque todo se comprende en su totalidad, y no puede ser de otra manera, para el que lo vive, e incluso para el que no lo vive todavía, tan pronto como aceptas estas pocas ideas básicas, concernientes a la acogida y al don de sí.
La Luz se consagra a la Luz en superabundancia desde el momento en que aceptas que Eres la Luz, incluso sin vivir en Ella, desde el momento en que dices sí, hasta todo lo que la vida te ofrece, sin excepción. Desde el momento en que dices que sí a todo lo que puede oponerse desde dentro de ti, como fuera de ti, a lo que vives, a lo que Eres, porque así es como tú alimentas la Verdad que está en ti, y a quién tú Eres. Todo lo demás solo retrasa o te da la impresión, la ilusión de que no es para ti, o que estás lejos de ello. Todas estas son solo excusas y coartadas de la historia, diría yo, pero no hay pretextos, ni coartadas en el momento del evento. Entonces, ¿por qué esperar, por qué diferir, por qué tergiversar las cosas?
Porque desde el momento en que existe en ti una imposibilidad total y visceral, para emitir la más mínima crítica o juicio de cualquier persona o cosa, en ti o fuera de ti, entonces tú, comprobarás de inmediato que la Alegría los conduce, en la Morada de Paz Suprema, que es donde está tu único y verdadero lugar, que jamás pasará.
Y diría que hoy, eso puede parecer lejos de ti, o fuera de tu alcance, y cuanto más estés convencido de eso, diría que es cuanto más te acercas. Porque el Amor y la Verdad solo pueden consumir lo que has puesto delante de ti. Entonces, no te preocupes, solo sé gentil y paciente, en todo momento, contigo mismo como con todos los demás, como con las circunstancias de este mundo, cualesquiera que sean los horrores revelados por la Luz Misma y su iluminación; acepta, simplemente, porque tu simple don de sí y tu simple acogida, y la transparencia que le sigue, pondrán fin a esto, obviamente para ti como para todos los demás, así como para todo el sueño colectivo del mundo, así como el sueño colectivo de la conciencia.
No hay otra certeza más que ésta, no hay otra verdad más que esta. Todo lo demás son solo verdades relativas que dependen únicamente de las circunstancias y del paso del tiempo, o de las dimensiones mismas. Y hoy se te ofrece en abundancia, digas lo que pienses al respecto, digas lo que digas, importa poco, al fin de cuentas. Porque todo lo que tengas que decir al respecto, lo que sea que tengas que negar o rechazar, siempre te acercará a esta Verdad. Es en esto que uno no debe comparar, ni juzgarse con nada, ni con nadie, porque nada se puede medir en Alegría. Todo se puede medir, ya sabes, en la vibración, en la energía, pero en la Alegría, no hay nada que medir, porque la misma medida está en todas partes, cualquiera que sea la medida oficial, lo que sea apariencia, cualesquiera que sean las experiencias también.
Y esto se te ofrece con cada mirada y cada respiración, como en cada ocasión, incluso si piensas que es exactamente lo contrario. El Amor no tiene nada que ver con lo que piensas, con lo que crees o lo que no crees, especialmente ahora. La única diferencia es simplemente vivirlo con ligereza o dureza, pero el propósito es exactamente el mismo. No puede haber otro. Porque lo que es completo y perfecto desde toda la eternidad, no puede concebir ningún camino, forma o dimensión alguna, porque ya ha pasado por todo esto, con todos los sueños que ha realizado, y que ya no necesita soñar, ni experimentar nada. Ya no necesita moverse, interiormente, simplemente necesita acomodarse, de una manera cada vez más grande y amplia, a todo lo que se presenta, de cualquier forma que se presente. Porque al final, lo sabes, en el momento en que lo ves, o te acercas a ello de alguna manera, entonces sabes que no hay otro camino u otra vía posible, y que nunca estarás contento en otro lugar que no sea Aquí.
También lo es la Libertad. Porque la Alegría es Libertad, y el Amor es Libertad, y no puede ser sometido, en definitiva, más allá de cualquier sueño de la conciencia, a cualquier forma o historia de creación en absoluto. Y ahora se te da y es accesible para todos, también allí, de una manera cada vez más presente y cada vez más percusiva. Y como te dije, y te digo hoy, nadie puede quedar por fuera. Es imposible. Porque no hay mejor, ni más elevado, ni más superior. Simplemente es eso. Entonces, por supuesto, esta Alegría puede expresarse, ya sea con palabras, canciones o cualquier cosa que se te ocurra. Pero sabes muy bien que no eres tú quien lo hace o lo crea, sino que es la Vida en ti que lo realiza en ti.
Entonces la Libertad real y total dará el paso definitivo en toda la historia, en toda la memoria, como en toda proyección. Mientras pienses que tienes algo que hacer o emprender, no estarás disponible, porque estarás irremediablemente en el siguiente instante o en el último instante. En el Aquí y Ahora, como es soportado hoy, nada puede insertarse, viniendo del pasado así como viniendo del futuro, así como viniendo del cuerpo, así como viniendo de los pensamientos. Y es en este juego, que se juega actualmente, que cada vez son más numerosos para ver más y más claramente. Ver claramente aquí, no significa simplemente iluminar lo que pertenece a la ilusión de este mundo o a su depredación, sino iluminar ese núcleo de la Eternidad que Eres, que es anterior a toda forma.
La Alegría sólo puede venir de allí, es la Inteligencia de la Luz la que vive en ti. Pero pero qué más eres, sino esta inteligencia que no depende de ninguna forma, conciencia o ningún otro mundo. La totalidad de los mundos y las creaciones están presentes en lo que Eres, al aterrizar en la Tierra, esto significa que, cualquiera que sea el nombre de tus linajes, tu origen estelar siempre te conducen al mismo lugar, que es esta Tierra, en el Aquí y Ahora, y es a través de ti, que todo se juega. Por supuesto, no solo para ti, sino para el conjunto, no de la Tierra, sino de todas las creaciones, como de todo el multiverso.
No necesita conocer las historias, ni necesitas conocer los pormenores, pero solo tienes que estar presente y dejarlo atravesar. No tienes otra función, ni tienes otro rol, ni tienes otra misión que encontrarte a ti mismo. Y esto se hace sin tu persona y sin tu participación. Esto pondrá fin a toda identificación, en cuanto a la farsa final de la conciencia misma.
...Silencio...
Amado, podemos continuar.
— No hay más preguntas escritas, no sé si hay alguna en la sala.
Entonces, dejemos que los que están presentes se expresen espontáneamente. No te abstengas de nada, permite que espontáneamente se exprese que debe salir. No hay ningún absurdo, incluso en la pregunta que pudiera parecer la más absurda, ya que todo es una excusa para conducirte de regreso a lo esencial. Y todo es solo una oportunidad para vivir la Alegría.
***
A través de Jean Luc Ayoun
https://lestransformations.wordpress.com
http://www.autresdimensions.info/
http://sabesquienerestu.blogspot.com.es/
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