Hay muchas técnicas de respiración que pueden ayudarte
a vivir más intensamente y más contento. El primer ejercicio es muy sencillo.
Mientras inhalas te dices “al inhalar, sé que estoy inhalando”. Luego exhalas y
te dices “al exhalar, sé que estoy exhalando”. Nada más. Reconoces que la
inhalación en una inhalación y que la exhalación es una exhalación.
Ni siquiera tienes que repetir toda la frase, basta
con decir “inhalando” y “exhalando”. Ésta técnica te puede ayudar a
concentrarte en la respiración. A medida que practicas, tu respiración se va
calmando y se dulcifica, lo mismo pasa con tu mente y tu cuerpo. No es un
ejercicio difícil. Bastan un par de minutos para que empieces a sentir los
efectos de la meditación.
La inhalación y la exhalación son muy importantes y
agradables también. La respiración conecta el cuerpo con la mente. A veces, la
mente está distraída en cualquier cosa, mientras el cuerpo hace otra; nuestra
mente y nuestro cuerpo no están en armonía. Al concentrarnos en la respiración,
en la inhalación y la exhalación, reconectamos el cuerpo con la mente y
recuperamos la plenitud. La respiración consciente es un puente importante.
Para mí, es una alegría de la cual no puedo
prescindir. Todos los días la practico meditación consciente en mi pequeña sala
de meditación en la que tengo pegada ésta frase: “Respira, estás vivo”. Basta
con respirar y sonreír, para hacernos felices, porque cuando respiramos
conscientemente, recuperamos la plenitud y nos conectamos totalmente con la
vida en el momento presente.
En nuestra sociedad tan ocupada, es una gran fortuna
respirar conscientemente de vez en cuando.
Podemos practicar la respiración consciente no solo
sentados en una sala de meditación, sino también mientras trabajamos en la
oficina o en la casa, mientras vamos manejando o en el bus, en cualquier
momento del día.
Hay muchos ejercicios que podemos hacer que nos ayudan
a respirar conscientemente. Además de ese sencillo ejercicio, en el que
repetimos “inhalación” y “exhalación”, podemos repetir mentalmente éste poema,
mientras inhalamos y exhalamos:
Al inhalar sonrío,.
Al exhalar relajo el cuerpo,
Habitando el presente, maravillado en el momento.
Repetir éste verso es como tomar un vaso de limonada
fresca cuando hace calor. Uno siente la frescura en todo el cuerpo. Cuando
inhalo y repito éste verso, siento que se relajan mi cuerpo y mi mente.
Una sonrisa puede relajar cientos de músculos de la
cara. Llevar una sonrisa en la cara, es señal de que eres dueño de ti mismo.
“Habitando el presente”…Estoy sentado y no pienso en
nada más. Estoy sentado y sé exactamente dónde estoy.
“Maravillado en el momento”…Qué alegría estar
sentados, derechos y cómodos, y reconectados con la respiración, con la
sonrisa, con nuestra verdadera naturaleza. Nuestra cita con la vida es en
el momento presente. Si no tenemos paz y alegría ahora, ¿cuándo vamos a
tenerlas? ¿Mañana? ¿Pasado mañana? ¿Qué nos impide estar felices en éste
momento?
Mientras le prestamos atención
a la respiración, podemos repetir” relajándome, sonriendo, momento presente,
momento maravilloso”.
Éste ejercicio no es solo para principiantes. Muchos
de los que practicamos meditación y respiración consciente hace cuarenta o
cincuenta años, seguimos meditando igual, porque éste tipo de ejercicio es muy
importante y sencillo.
Thich Nhat Hanh (La Paz está cada Paso)
Gracias olguita. yo lo he experimentado de sentir angustia, preocupacion y con solo inspirar y exhalar magicamente nuestro cuerpo se aquieta y normaliza. Abrazos
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