Hay muchas razones por
las que nuestra energía puede llegar a debilitarse.
Obsérvate por ejemplo
tras un gran enfado, decepción, disgusto... ¿Qué sientes? ¿Cómo te encuentras?
Es muy común encontrarse cansada, triste, decepcionada… Y esto sucede porque se
crean huecos, grietas en nuestro campo energético y esto nos afecta.
También puedes observar
esto mismo cuando el exceso de preocupaciones y el estrés hacen mella en ti; ya
que en estos momentos nuestra energía se encuentra sobreexpuesta y forzada.
¿Qué síntomas puedo
identificar como qué mi nivel de energía está bajando?
¿Te cuesta levantarte?
¿La desgana te acompaña
durante todo el día?
¿Por mucho que intentes
descansar no lo consigues?
¿Sientes como un vacío
dentro de ti?
¿Sientes angustia,
tristeza sin causa aparente?
¿Por mucho que mires,
solo ves la parte negativa de las cosas?
¿Reaccionas
desmesuradamente ante cualquier desavenencia?
¿Interpretas casi todo
como un ataque hacia ti?
¿Estás todo el día
cansada?
¿Notas cómo que tu
creatividad baja o desaparece?
¿Tienes la
espalda/cuello contracturados?
¿Te es difícil concentrarte
en una actividad normal?
¿Sientes que de repente
el corazón “se te sale del pecho”?
¿Sientes que la vida es
injusta?
Si logras identificar
entre 0-3 de estos puntos tu energía está bien.
Si logras identificar
entre 4-7 de estos puntos vigila tu energía.
Si logras identificar
entre 8-10 de estos puntos no lo dejes para más tarde, es el momento de coger
“al toro de los cuernos” y hacer algo antes de entrar en una espiral difícil de
salir.
Si logras identificar
entre 11-14 de estos puntos, tranquilízate primero y luego no dudes en buscar
ayuda; el tomar conciencia es ya un gran paso y desde este paso hasta la
recuperación ya no queda tanto.
Autora: Rosa Francés Cardona (Izha)
Acupuntora, MTC, hipnosis, Dietética y Nutrición, Coaching 3.0
Regente de la Herboristería Herbasana de Canals (Valencia).
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